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-Porque los científicos que han seguido con el experimento son tus tíos

-¿Qué? -me burle

-Sé que no me lo vas a creer, pero, tus tíos eran los encargados del experimento, estaban concentrados en encontrar la fórmula perfecta para crear al soldado perfecto, pero el gobierno detuvo el experimento a la mitad, ellos se molestaron y siguieron con las investigaciones a escondidas del gobierno. Nosotros nos enteramos hace unos meses, cuando varios estudiantes, incluyéndote a ti, presentaron comportamientos extraños

-Espera un momento. Mis tíos serían incapaces de hacer algo como eso

-Piénsalo, si ellos descubrían la formula, si la descubren, pueden vendérsela a cualquier país por mucho, mucho dinero. Estaban a punto de resolverlo, parar no era una opción para ellos

Tenía sentido lo que decía, pero lo que no tenía sentido, era que mis tíos fueran los responsables.

-No quiero seguir escuchándote

-No tienes que hacerlo, ya dije todo lo que quería que supieras -suspiró -si quieres comer algo, puedes ir a la cafetería

-Gracias -susurré

El hombre no dijo nada más y se fue de la habitación.

Tenía hambre, claro que sí, hace horas que no teníamos una comida decente y habíamos gastado mucha energía, pero prefiero quedarme con ella en todo momento hasta que despierte.

El silencio de la habitación me hizo pensar en muchas cosas. En la posibilidad de que mis tíos sí fueran los responsables de esto. Pero si sí lo son ¿Qué me queda a mí? Ellos son la única familia que tengo en el mundo.

Después de unas cuantas horas, Alice comenzó a despertar, me lo hizo notar con los quejidos que hizo.

Abrió los ojos y miró por todos lados un tanto confundida, pero parece que todo en su cabeza se disipo cuando me vio.

-Hola -la saludé con una sonrisa

-Hola -dijo lo mismo del mismo modo

-Lamento...

-No lo digas -cerró los ojos y negó con la cabeza -no eras tú, no te preocupes

-Pero yo...

-No es tu culpa, no hay necesidad de que me pidas disculpas

Me quedé en silencio por un momento.

-¿Es el hospital? -preguntó ella

-No, en realidad, no sé donde estamos

-¿No lo sabes? -me miró sorprendida

-No

-Pero, esas personas...

-No sé quienes sean ellos, pero... no te preocupes por eso ahora, mejor descansa y recupérate bien

Llevé las yemas de mis dedos a su cuello donde estaban las marcas de mi intento de estrangularla. Las marcas de mis dedos parecían moretones en su piel.

-Oye -me tomó la mano apartándola de su cuello -no eras tu ¿Entiendes? No te preocupes, no te guardo rencor o te tengo miedo, todo sigue igual ¿Okey?

-Tal vez tu no me tengas miedo, pero yo sí

-¿Me tienes miedo?

-No -sonreí -me tengo miedo, no quiero volver a lastimarte. Parece que mientras más pasa el tiempo, más peligroso me vuelo, una tercera vez... no sé hasta donde llegaría a lastimarte -susurré

-Lo vamos a arreglar -apretó mi mano -no te preocupes, si te sientes mejor, prometo que en cuanto comiences a perder el control de nuevo, me alejaré, correré lo más lejos que pueda

-Eso suena bien, hazlo, por favor

-Lo haré, no te preocupes

Por el silencio de la habitación, fue demasiado fácil escuchar que Alice tenia hambre, aunque a ella le dio vergüenza, a mí me dio risa y ternura.

-Me dijeron que podíamos ir a comer en cualquier momento, dijeron que había una cafetería aquí

-¿Has comido ya?

-No, estaba esperándote -sonreí

-Si vas por algo de comer ¿Puede que averigües algo de dónde estamos?

-Probablemente sí, de lo poco que vi cuando salí de mi habitación, parece que estamos en un lugar bien atendido -me levanté de donde estaba sentado -iré por algo de comer

-Solo espero que la comida no sepa como en los hospitales, no tengo ganas de probar comida desabrida

-Ya vuelvo -sonreí

Cuando salí de la habitación de Alice, había dos hombres a cada lado de la puerta, quienes, al verme más tranquilo, no se alteraron como la primera vez.

-¿Saben donde esta la cafetería?

-Esta en la primera planta -dijo uno de ellos -puedes tomar el ascensor, está doblando la izquierda al final del pasillo

-Gracias

Seguí las instrucciones y tomé el ascensor, al parecer estamos en el 5 piso y tenía que ir hasta el primero.

Para cuando las puertas se abrieron, el movimiento de personas era mucho más que donde nos encontrábamos, prácticamente en nuestro piso, no había nadie a comparación de aquí.

Techos altos, ventanas altas, todo parecía como un edificio de los Avengers, solo que aquí todos en lugar de llevar ropa de oficina, llevaban uniformes militares.

Caminé un poco por el lugar tratando de averiguar dónde estábamos, pero no lo sabía, el único paisaje que había a las afueras de las ventanas era un campo, cielo despejados y más personas con uniformes militares caminando por todos lados.

-¿Te has perdido?

Me di la vuelta hasta encontrar a una mujer vestida con un pantalón militar, una camisa de manga corta negra, el cabello oscuro en una coleta y una sonrisa.

-S-Sí, un poco

-¿A dónde quieres ir?

-A la cafetería

-Estas muy lejos aún -levantó su mano para que la tomará en un saludo -soy Dennis -tomé su mano

-Soy...

-Jinyoung, lo sé, atacaste a mis hombres anoche

-Lo lamento

-No hace falta que te disculpes, vamos

Comenzó a caminar por delante.

-¿Dónde estamos?

-Instalaciones militares

Me detuve y ella lo hizo igual.

-Oye, oye -levantó las manos -no somos los mismo que los venían persiguiendo

-¿Cómo sabes que nos venían persiguiendo?

-Porque eran nuestros hombres, pero desde que decidieron hacer las cosas ilegales, dejaron de serlo

-¿Ilegales?

-Conociste a Dann ¿No?

-Creo

-Te lo dijo ¿No? El por qué estas aquí

-Sí

-Bueno, ellos son los malos, nosotros no, así que no tienes porqué preocuparte, además, te conviene quedarte aquí

-¿Por qué?

-Tu novia esta herida, no puedes llevártela, aquí le daremos toda la atención medica que necesita

-Ella no es... mi novia, es mi amiga 

Soldado Perfecto (ParkJinYoung - GOT7)Where stories live. Discover now