Mis ojos estaban clavados en los suyos. Esas profundidades color chocolate, estaban llenas de emociones, llenas de amenazas, y podría decirse que hasta de miedos.-Bueno, vamos a comenzar -habló Marta. Poché giró la cabeza para mirarla.
-¿Tú vas a sacar las fotos? -le preguntó algo nerviosa.
-Si, ¿Cuál es el problema? -le preguntó su madre.
-No, nada -dijo y volvió su vista al frente. Soltó un leve gruñido.
-¿Qué sucede? -le pregunté.
-Esperaba que mi madre no fuera la fotógrafa -me dijo.
-¿Por qué?
-Porque a veces... pide demasiado...
-Ahora Calle, pon tu brazo izquierdo alrededor de la cintura de Poché y acércala a ti cuando yo te diga -me dijo.
Hice lo pedido y cuando dijo ya, la acerqué a mí haciendo que chocara levemente contra mi pecho.
-Perfecto -habló Marta -Ahora mírense a los ojos. Poché pon tus manos sobre sus hombros y acércate más a su rostro. La aperlada giró la cabeza para mirarla.
-Marta.. -la llamó por su nombre, como forma de advertencia.
-Haz lo que te digo -dijo ella. La aperlada obedeció y se acercó más a mí -Poché, quiero que dirijas tu mirada a la cámara. Tú Calle, solo mírala a ella. Otro flash iluminó todo.
-¿Cuántas fotos más vas a sacar? -preguntó Poché.
-Varías, varías -contestó Marta -Ahora quiero ver deseo, mucho deseo.
-Tus peticiones son órdenes para mí, Marta -le hablé. -¡Nooo! -chilló ella. -¡Poché, actúa como si desearas a Calle o te reduzco el sueldo! -la amenazó.
-Vamos tempanito de hielo, haz caso. Las mamás siempre tienen la razón, ¡Deséame!
-Como los odio -musito ella. -Ahora Calle, levanta a Poché sobre ti y coloca una de tus manos justo cerca del parche en dónde está marca y la otra en su espalda.
-Mamá, ¿Desde cuándo las fotografías se volvieron tan.... pornográfícas?
-Ay Poché, eres tan... quisquillosa. Haz lo que te digo, así terminamos todo esto rápido. Ella murmuró algo que no logré entender.
-Vamos cariño, arriba -le dije y la alcé sobre mi. Sus piernas se cerraron alrededor de mi cintura, y sentí que iba a volverme loco ante el adictivo aroma de su perfume.
-Poché, peina su cabello hacia atrás con tu mano y mírense las bocas.
Parecía que ella ya no iba a protestar. Su mano se enterró en mi cabello peinando me hacía atrás, y sus ojos se clavaron en mis labios, igual que los míos en los de ella. Luego de media hora, en dónde seguimos posando cerca, muy cerca. En dónde ella posó sola, y de verdad parecía una modelo profesional, haciendo caras y gestos. Hasta yo tuve mis poses sola, y debo decir que soy más buena de lo que pensaba.
-¡Excelente, hemos terminado! -dijo Marta contenta. Todos aplaudieron -Muchachos, las fotos son increíbles, hermosas.
-Voy a cambiarme -sentenció Poché sin prestar atención a su madre. Marta se giró a verme. -Ahora está irritada, pero ya se le va a pasar -me aseguró. Asentí y me fui a cambiar. Cuando volví ella ya estaba, guardando unas cosas dentro de su cartera. Me acerqué a ella. -Cometas algo sobre esto, y te juro que iré a buscarte y te arrancaré uña por uña ¿Escuchaste?
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"Steal My Girl" #Caché (Adaptación)
FanfictionEsta Historia es una Adaptacion Esta historia es de @BlancoStylesHoran