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La alarma comenzó a sonar sin parar, mis ojos por inercia se apretaron para luego yo estirar mi brazo, medio abrir los ojos y apagar la alarma. Me sente sobre la cama, mire hacía el suelo un momento hasta que me levante y me dirigí hacía al baño para ducharme.


Tras terminar de ducharme salí del baño con una toalla alrededor de mi cadera, mi cabello mojado dejaba varias gotas sobre mi abdomen y cara. Abrí el armario para sacar el espléndido traje que se encontraba perfectamente limpio y planchado para este día.

Comencé a vestirme; primero tome el pantalón y me lo coloqué con facilidad para luego comenzar con la camiseta blanca de botones los cuales abroche para finalizar con meterla justo en mis pantalones. Proseguí con la corbata, algo fácil de poner pero sin perder el tiempo acomode las mangas de mi camiseta y finalmente el saco.

Mirándome al espejo comencé a cepillar mi cabello, acomodandolo de la mejor manera posible. Coloqué un reloj sobre mi muñeca para luego dirigirme hacia la cama y tomar el portafolio, rocíe algo de perfume sobre mi cuello y finalmente salí del departamento para dirigirme hacia el trabajo.

Estacione el auto justo cuando llegue al lugar donde pensaba trabajar, millones de voces se escuchaban a la vez que ni siquiera podría descifrar de que hablan aunque podría ser cualquier chisme de adolescentes. Comencé a caminar por el montonal de niños; algunos me miraban, a otros les daba igual y habían chicas que simplemente no podría creer que me estaban "coqueteando".

Tras caminar por los largos pasillos del colegio por fin llegué hasta aquella puerta la cual tenía un pequeño letrero que decía "Dirección". Toque la puerta y después de escuchar una voz abrí la puerta para encontrarme con mi nuevo jefe.

T/n Cowell

Corría por los pasillos como si un maldito violador me estuviera persiguiendo pero en realidad ya llevaba varios retardos con la profesora Martha y ella es tan buena persona que no me ha mandado a detención pero me advirtió que una más y lo hacía así que por eso no quería llegar tarde.

Habían dado el timbre, casi ya nadie estaba en los pasillos pero aún así yo corría, rogándole a Dios que la profesora no se encontrara en el salón todavía. Y cuando veía más cerca mi meta, choco contra algo o alguien.

—Lo-Lo lamento —Acaricie la parte donde me había lastimado.

—No hay problema —Observo como se agacha para tomar algo del suelo —Creo que esto es tuyo —Me entrega el libro que llevaba en mi mano antes de chocar

—Oh si —Reaccione y lo tome —Gracias —Sonreí para luego mirarlo, sus ojos eran verdes y realmente encantadores que trataba de buscar un fondo pero los seguía mirando y solo me hipnotizaba mucho más.

—Ehh...yo me tengo que ir o si no llegare tarde a mi clase, adiós —Dije rápidamente para luego correr hacía mi aula.

Solté un enorme suspiro de alivió cuando me di cuenta de que la profesora no se encontrara en el salón. Me dirigí hacía mi asiento mientras que sacaba mis cosas.

—¡T/n! —Alguien me tomó del brazo mientras que gritaba mi nombre repetidas veces.

—¿Qué pasa? —Pregunte algo preocupada y confundida.

—¡No lo vas a creer! —Realmente se escuchaba emocionada.

—¿Qué pasa Jane?. Estas comenzando a preocuparme —Comenzaba a desesperarme por aquella noticia tan emocionante que me darían.

𝐂𝐥𝐚𝐬𝐬 𝐅𝐨𝐫 𝐒𝐞𝐱 © [✔] #1y2Where stories live. Discover now