MI OMEGA

Adam,Josh y harry son alfas hermanos.

Adam: 23
Josh:20
Harry:19

Louis: omega.

Un día de mierda, eso era para harry, nada estaba bien ya que sus hermanos lo llevaran a un lugar donde habían omegas que quizás nisiquiera quieren estar ahí. Él solo quiere encontrar el suyo pero sus hermanos no entienden.
Sus padres están de acuerdo ya que quieren que sea "alfa de verdad"
Su madre se escuchaba muy decidida al decir "si no te haces alfa, no vuelves a casa"
Harry no entiende el por qué su familia está tan desesperada de ello, tan solo tiene 19 años, el único "virgen" entre sus hermanos, lo cual era mal visto.

Ahora iban camino al prostíbulo, harry odiaba eso, de hecho se siente obligado a hacer algo que no quiere.

-listo harry llegamos.-dijo Josh. El sabe mucho de estas cosas porque siempre se encuentra en alguna de esas habitaciones con alguna de esas omegas indefensas.

Mientras iban caminando, harry podía oler muchos aromas de omegas y alfas, todos mezclándose formando uno solo y muy asqueroso, hasta que por fin llegaron a una especie de recepción en la cual había una beta sentada frente a un computador.

- dame la mejor.-dijo Josh dejando unos billetes en la mesa de la cajera.

Harry no sabía a qué se refería su hermano, pero prefería no preguntar.

-Josh, la de siempre está ocupada, lo siento, sólo nos queda una opción.-dijo la beta que estaba en la entrada.

-pfff, bueno, total sirven para lo mismo.-dijo adam.

Sus hermanos piensan así de los y las omegas, siempre decían que sólo sirven para servir a los alfas y hacerles de todo, ya que los alfas solo deben trabajar. Harry cree que ellos piensan así ya que su madre odia a los omegas, pero el alfa rizado era la excepción en su horrible familia, él piensa diferente, los omegas existen para cuidarlos y quererlos, son criaturas las cuales hay que acariciar con el mayor cuidado del mundo.

La beta de la recepción les dió unas llaves que tenían un llavero con un número grabado en el, harry suponía que era el número de la habitación.
Mientras caminaban hacia la habitación un olor dulce se hacía cada vez mas intenso.

💕💕💕

Louis no podía creerlo, justo ahora, su celo! En un lugar lleno de alfas que buscaban lo mismo, los cuales no les importa hacer daño. El pequeño omega podría salir lastimado o embarazado.
No pensó que sus cálculos fallarían, sin duda su celo se adelantó y el omega no sabía la razón.

Necesita irse.

Desesperado comenzó a guardar sus cosas en su bolso cuando el maldito telefono fijo de la habitación sonó.

"tomlinson tienes clientes"

-hum.. ahh... Clientes?, es decir más de uno?.-  sus manos habían comenzado a temblar.

"sí, diviértete"
y colgó.

Su aroma cada vez se hacía más fuerte, el calor corporal aumentaba rápidamente volviendolo insoportable, sin poder evitarlo soltó un gemido y con ello un montón de feromonas que inundaron su habitación.

Temía por su vida.

💕💕💕💕

Ese aroma... Le resultaba tan familiar, pero era imposible, nunca había estado con ningún omega, nisiquiera amigos

Abrieron la puerta y lo que se quedaron viendo era una total locura para él.

un omega en celo