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Treinta y cinco días.

Creo que fue una de las peores semanas de mi vida, no supe absolutamente nada de ti.

Por alguna razón Ryujin y Yuna estaban enojadas conmigo, la última vez que hable con ellas me dijeron que era un idiota y dejaron de buscarme.

Yeji me mandaba a la mierda cada vez que le preguntaba por ti, aún así era la única que seguía estando para mí cuando realmente necesitaba a alguien

Ese día, madre me obligó a invitar a Somi al cine, pensé que tú y yo nunca fuimos al cine juntos, una pena ¿no lo crees?

Odiaba la situación, la odiaba a ella por ser la culpable de que ya no te tenía a mi lado. Decidí llevarla a comer un helado, nada más, sabía que mi madre se enojaría pero ya se me ocurrirá alguna excusa.

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¿Por qué de todas las heladerías de la ciudad tu tenías que estar en esa? y aun peor, ¿Porque estabas con Mingi?

Me congelé cuando noté que me estabas mirando, más exactamente, que estabas mirando mi mano la cual estaba entrelazada con la de Somi , te prometo que tomar su mano nunca se sintió como tomar la tuya, tu mano me hacía sentir protegido, como si nada pudiera dañarme.

Cuando note que Mingi te susurraba algo al oído y tú le sonreías, quise correr, huir de ese lugar, encerrarme en mi habitación y llorar hasta quedarme dormido, tal como lo había hecho cada noche desde que terminamos.

Somi se dio cuenta de que no podía apartar mis ojos de ti y lo único que se le ocurrió fue darme un beso en los labios. Creo que mis ojos se cristalizaron cuando la alejé y vi que Mingi te estaba abrazando.

No lo soporte, deje a Somi botada y me fui. Yeji tenía razón, Mingi haría que te olvidaras de mí.

Look At Me || WoosanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora