¿Normal? [Finalizado]

×6×

*la pregunta final es para ti, responde "si" "no", dependiendo de esto se avanzará la historia, de no haber respuesta, seré yo quien tome la decisión*

--Soraru..--

--sólo fue algo que estábamos ensayando entre todos, si vieras como actúan cuando ponen de su parte--

--no me refiero a eso..--

--ya se que debo evitar encariñarme..no necesito que me lo repitas cada que vez que me acerco a alguien..--

Hashiyan sólo toca su hombro

--lo siento pero es necesario..--

Soraru asiente y lo ve irse por el extenso pasillo.

Ahora sentía una gran necesidad de encerrarse, no salir y ver como el dia pasa hasta ser mañana para cumplir otro año de estadía en ese lugar.

"¿Normal?"

La semana se fue y era día de visita, cuando Hashiyan le dijo que tenía a alguien esperándolo en la sala, se llenó de alegría y corrió a recibir a quien estuviera ahí.

Aunque ya tenía cierta idea.

--¡Sakata!--

El pelirojo se levantó de su lugar y recibió al albino entre sus brazos.

--mi pequeño Mafumafu, me alegra verte--

--a mi igual me alegra verte--

se separó rompiendo el abrazo.

--¿cómo estás?--

Se sentaron en su respectivo asiento.

--am..bien se podría decir..las voces..ya no molestan tanto..pero hay dias en las que..simplemente gritan..--

Sakata tomó de su muñeca con cuidado y apartó la tela blanca que cubría y era parte de su ropa de hospital encontrando los cortes pasados ya cicatrizados pero hay algunos rasguños hechos por sus propias uñas de manera reciente.

--Mafu..--

--no puedo evitarlo.. este sitio me da miedo también..a veces sólo las hago inconsientemente cuando escucho a otros pacientes gritar..y no puedo..--

El contrario sólo suspira y lleva la mano maltratada del albino hasta sus labios para darle un delicado beso.

--esta bien, estoy aquí, tranquilo..te creo..--

Las mejillas de este se tornan rosadas y sonríe ligeramente.

--gracias por venir--

--y la próxima traeré a los demás, para entonces, debes poner de tu parte y mostrarte tranquilo, verás que pronto saldrás de aquí..--

Y así la tarde cayó, Sakata le contaba que sus amigos lo extrañaban, las clases eran aburridas como siempre y nada nuevo con los tutores de Mafumafu.

--bueno..supongo que nunca les importe..--

--pero no nos dejes de lado, a mi a y los chicos si nos importas--

--Sakata..yo..--

--el tiempo de visita terminó--

Aplaudió una enfermera dando la señal de retirada tanto de Sakata como los otros que vinieron a visitar a sus familiares.

--bien..esa es mi señal--

El pelirojo se levantó de su lugar, sacudió un poco la cabellera del chico y se despidió prometiendo que volvería.

Y así Mafumafu no pudo darle la respuesta que el esperaba, aunque tampoco estaba seguro de si era la persona correcta para Sakata, con las fallas que tenía se preguntaba lo mismo:

¿Qué es lo que vio Sakata en el que lo hizo enamorarse?

No entendía y tampoco es que se sienta completo ó listo para buscar respuesta.

Y menos tenía una para el y su confesión de hace meses.

--Mafu, ve al comedor a cenar--

Hashiyan lo saco de sus pensamientos sin meta o punto fijo, sin decir nada, se levantó de su lugar y se fue.

El frío de afuera se podía sentir por mas cerradas que estuviera las ventanas, su mirada pasó por todos los pacientes comiendo y haciendo ruido como era siempre, pero el chico solitario de cabellera azulada no se encontraba en la mesa vacía, era la segunda vez que se ausentaba.

Una extraña sensación paso por su nuca, un escalofrío que hizo salir del comedor y cambiar de rumbo.

Las voces ahora susurran diciéndole lo estúpido que era, sin embargo, las ignoro completamente y siguió sus pasos hasta la puerta vecina de su habitación.

Estaba algo abierta, Soraru se encontraba sentado mirando la ventana en silencio, viendo pasar las hojas secas, la tierra que movía ese viento con tanta fuerza y facilidad a la vez.

Mafumafu detuvo su mano sobre  puerta.

¿Debería intervenir?

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