03│Extra

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Primera Consulta:
Doctor Min.

—Media hora tarde —le dijo con notable desaprobación en su voz en cuanto lo vio ingresar al área de consultas, caminando con una conocida dificultad y luciendo como si nada le interesara en absoluto.

—Es un caso difícil —se excusó de forma irónica.

—Nunca lo son para ti —replicó el contrario, mientras seguía escribiendo en uno de los tantos informes que se encontraban sobre la mesa—. No intentes engañarme, porque no podrás lograrlo.

—Sí, bien —dijo en voz baja, restándole importancia al asunto—. ¿Y cómo andamos de hisopos hoy? Si hay escases, podría irme a casa ya.

—No hay problema con eso —respondió con el mismo tono de sarcasmo que el otro y le regaló una sonrisa—. Aún hay, puedes encontrar muchos. 

—Claro.

Pudo ver cómo su jefe volvía a posar su atención en el informe y sonrió de lado. Decidió alzar su mirada entonces, notando así que habían alrededor de veinticinco pacientes aguardando ser atendidos, la sala de espera estaba invadida.

Sujetó su bastón con firmeza y comenzó a caminar lentamente hacia el grupo de personas, quienes posaron su vista en él al instante y lo miraron de forma expectante, en cuanto se quedó parado en la entrada de la sala.

—Hola, gente enferma y seres queridos —saludó a los presentes con voz alta y clara, captando la atención de cada persona presente en el lugar—. Para ahorrarme el tiempo y evitar aburridas pláticas, les diré; soy el doctor Min YoonGi. 

En cuanto pudo escuchar eso, Kim SeokJin se olvidó completamente del informe que debía llenar. Dejó de lado lo que estaba haciendo, para después darse vuelta y posar su incrédula mirada en el hombre que estaba en la entrada de la sala de espera. 

—Pueden llamarme simplemente YoonGi —continuó el pelinegro—. Soy uno de los tres doctores empleados la corriente mañana —dijo con molestia—, y...

—YoonGi, cariño —SeokJin interrumpió al médico y se le acercó rápidamente, captando la atención del nombrado y el resto de personas—, toma un expediente. —Intentó entregarle uno, pero fue ignorado.

—El rayo de sol que acaba de hablar, es el doctor Kim SeokJin —continuó hablando YoonGi, sintiendo la atenta mirada de los pacientes—. El doctor SeokJin se encarga de dirigir todo el hospital. Y por desgracia, él tiene mucho que hacer por ustedes.

YoonGi miró de reojo a SeokJin, quien seguía viéndolo de forma incrédula e indignada, antes de seguir hablándole al resto de los presentes; 

—Soy un aceptado y respetado diagnosta, certificado con doble especialidad en enfermedades infecciosas y nefrología —continuó YoonGi—. Soy el único médico empleado que se encuentra aquí en contra de su voluntad —dijo él y algunos fruncieron su ceño—. ¿Eso es cierto, no? Diles. —Ahora sí se dio vuelta para mirar correctamente a su jefe y le sonrió con sorna—. Pero descuiden —otra vez posó su vista en los pacientes—, la mayoría piensa que a mi trabajo lo puede realizar hasta un simio con una botella de alcohol en sus manos.

Tras decir aquello, YoonGi pareció haber recordado algo importante, por lo que metió su mano derecha en el bolsillo de su abrigo y sacó un pequeño frasco de ahí mismo.

—Hablando de eso. —Alzó el frasco y todos lo miraron de forma confusa—. Si ustedes son muy molestos, probablemente me verán recurriendo a esto. —Sacudió el objeto, causando que se escuchara cómo chocaban las pastillas una contra otra—. Es Vicodin, y es mío; no se los daré —les aseguró—. No es que yo no pueda soportar cualquier dolor. Tengo un problema de dolor muy severo, aunque...¿quién sabe? —Dirigió su vista al suelo—. Tal vez...me equivoco o estoy muy drogado para decirlo con exactitud —agregó luego, provocando que los pacientes lo miraran con nervios, inseguridad y hasta incluso un leve temor—. Y bien, ¿quién pasa primero? 

Don't Lie To Me. [KookGi]Where stories live. Discover now