𝐏𝐑𝐈𝐍𝐂𝐄𝐒𝐒 | 𝐂𝐄𝐕𝐀𝐍𝐒

CHAPTER THIRTY-SIX

UNA SEMANA DESPUES.

AMELIA CAMINABA POR los pasillos mirando fijamente al frente, ese día llegaba Andrew a Londres para conocer a la familia Real.

Estaba confundida, toda esa semana se había visto envuelta en un sinfín de artículos amarillistas donde los medios británicos decían que su rompimiento con Chris había sido causa de una infidelidad por parte de el con su compañera Emily, lo cual era mentira, pero ahora todos veían a la rubia como la mala y no sabía ni como ayudarla.

—Buenos días, hermanita —Harry llegó a su lado con una sonrisa.

—Hola, Harry —saludó aún mirando al frente.

—Podemos sabotear a Andrew, una buena broma que lo espante al menos por unos meses —opinó entrecerrando los ojos—. La broma de la década.

—Andrew y yo somos amigos, Harry, pero gracias —rió—. Así que no es necesario.

— ¿Te uniste con el enemigo? —frunció el ceño—. ¿Qué sigue? ¿Tu y William como mejores hermanos?

—Oye —golpeó su hombro—. Estoy preocupada.

— ¿Por qué?

— ¿Viste lo que la prensa inglesa dice de Emily VanCamp? Pobre chica, no merece todo eso —negó—. Debe haber alguna manera de ayudarla.

—Ni de chiste te van a dejar que hables con la prensa de eso —se burló el pelirrojo.

Amelia hizo una mueca, su abuela y padre la tenían bajo vigilancia, no podía hacer o decir nada que no estuviera revisado o autorizado por ellos mismos.

—Pero tal vez tu sí —murmuró sonriéndole falsamente a sus tíos—. Harry ella...

—Mi padre me mataría —le dijo—. Todavía me tiene castigado por las fotos donde salgo desnudo y no olvidemos mi disfraz de nazi.

Amelia hizo una mueca—. Tendré que decirle a Johanna que me deje hablar en su evento —murmuró.

Amelia estaba contenta por que sus amigas estaban cumpliendo sus sueños, Johanna soñaba con ser diseñadora de modas y finalmente lo estaba logrando, Esmeralda y Nora habían empezado a trabajar como periodistas en la BBC y Andrea había puesto su propio salón de belleza... a todas le iba de maravilla pero no dejaban de extrañar estar juntas todos los días.

—Príncipe Andrew —Amelia y Harry hicieron una pequeña reverencia.

—Es bueno verte, Amy —la castaña sonrió dándole un fuerte abrazo.

—Lo mismo digo, Andy —ambos se separaron—. El es Harry, mi hermano mayor.

—Hola —saludó Harry.

—Hola, Amy habla mucho de ti.

—Espero que sean cosas buenas —Harry la miro.

—Cosas como cuando hicieron un tobogán improvisado en las escaleras del palacio de Buckingham y se lanzaron en un colchón —ambos hermanos rieron.