Campamento The Elements. [zodiaco]

C a p i t u l o 10

[NARRADOR; OMNISCIENTE]

El hombre cerró la puerta detrás de sí y les sonrió nuevamente, para luego señalar los viejos sofás que allí estaban.

— Bien niños, tomen asiento. — Sagitario como siempre se apresuró a ser el primero en sentarse. Cada uno tomó asiento junto con quiénes conocían, y los que no, donde hubiera un espacio.

— Ahora que están cómodos y me presenté es su turno. — Sonrió amable. Géminis pensó que lo podría ver sonreír toda su vida, para ella su sonrisa era simplemente preciosa. — ¿Quien quiere empezar?

Aries se encogió en su asiento y observó el suelo esperando que no lo eligiera, odiaba hablar frente a las personas ya sean desconocidas o no, pero para su suerte Sagitario y Géminis levantaron la mano a la vez. Alexander eligió a el chico que parecía tratar de alcanzar el techo con tal de que lo eligieran, se puso de pie y rápido se acercó a el centro junto a él adulto.

— ¡Hola a todos! — Observó a cada uno y en especial a las chicas para luego notar a Aries que antes no lo había visto. — Mi nombre es Sagitario y si quieren saber mi apellido deben preguntarlo. — Guiño el ojo y Virgo inclinó la cabeza cansado.

— Nadie quiere saber tu apellido Sagitario. — Dijo su amigo, Alexander le hizo una seña para que sea respetuoso y el chico chasqueó la lengua. — Siempre hace lo mismo para que alguien pregunte eso y nadie termina haciéndolo. Así que no entiendo porqué todavía lo preguntas.

Sagitario se rascó la nuca con nerviosismo. — Bueno... A demás de que es algo divertido, me parece entretenido esperar a que alguien le importe. — Apretó los labios y una mano se alzó en el aire llamando la atención.

— ¿Cuál es tu apellido? — Le sonrió Géminis, si a él le importaba eso, ella se lo preguntaría con gusto. Jamás le gustó que la gente sintiera que no le importaba a los demás.

Sagitario no pudo evitar sonreír con un brillo especial en los ojos, después de preguntarlo tantas veces alguien le había respondido. — Mi apellido es Coleman. — Trató de no reír y no sabía porqué. La chica lo halagó y el chico prosiguió. — Gracias. Hmm, tengo dieciséis años y... ya no sé qué más decir, creo que mi altura es 1,75 o quizás es menos, no lo recuerdo...

— Tranquilo Sagitario, todo lo que dijiste está muy bien. — Alexander lo tomó por los hombros y lo sacudió levemente. El chico pareció recordar algo y le sonrió.

— Oiga ¿Sabía que se llama igual que mi hermano menor? — Le sonrió mientras tomaba asiento y el hombre rió.

— ¿De verdad? Eso es increíble. — Le contestó como si se tratara de un niño. — ¿Tú querías ser la siguiente? Adelante.

— Namaste, mi nombre es Géminis, con acento en la E, O'connel. Tengo dieciséis años y soy una protectora y amante de la naturaleza, el medioambiente y los animales, claro que hasta donde puedo. Me gusta reciclar cualquier tipo de objeto o prenda. Como le gusta decir a mi madre: "Todo objeto puede tener una nueva utilidad". — Piscis la miró de arriba abajo y bufó burlona.

— Se nota. Esa ropa debe ser más vieja que mi abuela muerta. — Géminis miró su atuendo, quizás era verdad que estaba un poco vieja y usada, pero para ella era muy hermosa, contaba toda una historia. No se iba a enojar o entristecer por lo que le dijo así qué asintió y le sonrió para tomar asiento otra vez.

— Bien, gracias por presentarte Géminis. ¿Quieres ser la siguiente? — Señaló a Piscis que estaba sentada junto a Libra.

— Como sea, si hago que terminamos ésta mierda rápido. — Se acercó al centro pero ni observó a el hombre, en cambio se puso frente a él y observó con desprecio a los demás. — Soy Piscis, aunque para ustedes soy la señorita Piscis. ¿Entienden? No me pueden tutear. — Escorpio, Virgo y Libra estallaron en carcajadas, les pareció algo completamente absurdo.