cєrσ α ℓα iʑqυiєr∂α"↬ᵛᵐᶦᶰ

ꦿ⃮⇗⃟🍓 cinco.

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No sabía como es que todo había terminado así. Yoongi estaba a su lado realizando actividades, de química al parecer, mientras él trataba de prestar atención a la película que se reproducía en su computador. 

Decir que estaba incomodo era poco, se podría decir que Min YoonGi era su agresor de cierta forma, hace no más de unas semanas lo había humillado enfrente de casi toda la escuela y del chico que le gusta, ¿Cómo podría estar tan relajado y sin molestarle?

- ¡Ahg! - El pelinegro se quejo en voz alta, ocasionando que Jimin se exaltara y brincara levemente en la silla. Giró su mirada hacia el mayor, este tenía el lápiz en los labios mordiéndolo, bajo la mirada y notó que estaba haciendo unos problemas de los alcanos, algo sencillo de segundo semestre.

- E-El alcano tres es octano, no metilo, hyung. - Si, se había tomado el atrevimiento de corregirlo, pero era más que nada para ayudarlo.

- ¿No da lo mismo? Digo, ¿Es necesario saber todos los alcanos? - Sorprendentemente lo tomo a bien.

- N-No es necesario tenerlos memorizados, puedes hacer una pequeña tabla con todos los nombres, mira.

Tomó su mochila y sacó su cuaderno de química, donde tomo una hoja y se la pasó al pelinegro.

- Mira, con que tengas acomodados los nombres en orden basta para saber cuál es. - Jimin poco a poco tomaba más confianza con YoonGi y esté no se quejaba, de hecho, de rara forma, agradecía que le ayudara con los problemas pues tenía una sola oportunidad para recursar química dos y no la iba a mandar a la mierda tan serca de terminar su preparatoria.

Pasaron varias horas ahí metidos, Jimin explicándole al mayor y este entendiendo poco a poco como si de un infante se tratara. Al final lograron concluir la tarea del mayor, como también ya debían marcharse debido a que en poco tiempo se terminarían los prestamos de los cubículos de estudio.

- Espero recurses química con la nota más alta, Yoonnie Hyung.

-....Hace mucho que no me llamabas así - Jimin sintió sus mejillas arder y su corazón papiltar del mero miedo, es cierto, ya no tenían la confianza como cuando eran niños para hablarse de esa forma.

- Lo siento, Yoongi Hyung.

- No me mal entiendas, no me molesta que lo vuelvas hacer. - Acarició la cabellera castaña de Jimin sin mirarlo. Park sonreía poco a poco pensando que esta era su oportunidad para tener de nuevo a su mejor amigo, y Yoongi sonreía pensando que está era la oportunidad de acercarse a Jimin como siempre quiso. - ....¿Te parace si vas este fin de semana a mi casa?...D-Digo, mi madre te extraña y solo por eso te invito, aunque que si no quieres tampoco me importa mucho, no es que fueras taaan relevan-

- iré.

- Mi madre es quién quiere verte, yo no obvio, digo, ya te veo y - Jimin callo a Yoongi colocando su mano en su boca mientras sonreía.

- Iré, Hyung.

Min sintió sus mejillas colorarse gracias al tacto de las pequeñas y rechonchas manos de Jimin, se sentía tan dulce que literalmente no quería despegarse de él.

- B-Bien, paso por ti el domingo temprano.

El castaño asintió y se despidió rápidamente del pelinegro para salir por la reja del instituto con una gran sonrisa en los labios. Yoongi sonrió hasta que sintió un tirón en su mochila que lo hizo girar para mirar al responsable.

- ¿Qué harás con él? - El castaño tenía la mandibula apretada, tensa del enojo causado por la escena que presenció de Jimin y Yoongi.

- Eso no te interesa a ti, Kim - El pelinegro ignoró su mirada de furia y caminó hasta su motocicleta para ir en dirección a su hogar.

Ahora Taehyung sabía que debía actuar rápido. No podía perde a Jimin. No ahora que lo había encontrado.

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- Salero Cósmico.