DUELES

A disfrutar

-M-Marinette t-tenemos que hablar mi amor-intento que mi voz suene lo más normal posible-Y-yo me v-voy a c-casar-no lo aguanto y caigo en sus brazos

-¿Q-qué?

-Lo que oíste vida mia, perdóname, mi padre lo hizo como venganza porque no quería que tu y yo estemos juntos

2 meses después me encontraba celebrando mi "compromiso"

-Hoy quiero agradecer a la señora Tsurigi, la madre de la señorita Kagami por aceptar el compromiso de nuestros hijos, y aceptar el amor que ellos tuvieron durante mucho tiempo en secreto-Mentiras y más mentiras

A lo lejos veo a Marinette con los ojos cristalizados y mirando el piso

Por momento veo que mi padre desvía su mirada hasta ella y le da una sonrisa maliciosa, eso me hace sentir culpable

- Se le ofrece algo- me preguntó camarero haciéndome salir de mi trance

- Eh, si dame una bebida natural, por favor-Me la entrega

Yo no sabía que tenía esa bebida...

[...]

Despierto en mi habitación medio adormilado, apenas consciente lo que hago, pero me acuerdo de lo que pasó anoche y me hace sentir una mierda

Veo a la azabache alado de mi y siento mariposas pero estas son más de culpabilidad, no como una vez sentí por Marinette, es confuso pero sé mis sentimientos y lo que tengo que hacer.

[...]

-Marinette tenemos que hablar-digo con voz seria, ella solo asiste mirando el piso-Bien, mi padre no me dio mucho tiempo, por eso seré directo- suspiré esto iba a ser lo más difícil de mi vida- Anoche yo- me interrumpió

-Anoche tú te acostaste con Kagami- respondió con simpleza y seria

Pero poco a poco su mirada fría se fue transformando en una mueca de dolor y pronto las lágrimas empezaron a salir tus ojos

-Si, yo, tu padre me dijo que limpie la habitación donde tú te habías quedado dormido con ella, tu padre lo hizo porque quería que yo viera lo que tú hiciste-dijo y se puso a sollozar -Yo no lo creía ¿No lo hiciste por voluntad propia, verdad?

-Yo...

-Kagami, mi amor, ven a bailar conmigo-le susurré al oído

Espero un rato de baile entre risas la agarré de la cintura y la besé, pero no sentí las mariposas que había sentido por Marinette en algún momento

-Ven conmigo-y nos fuimos a unas de las habitaciones de invitados, eso sí en mi habitación lo había hecho con Marinette y eso fue especial. No, no haría allá con ella también

Sabía que no era virgen y yo tampoco, la había perdido con Marinette, así que ¿Algo nos detiene? no, a disfrutar...

-Sí, si lo hice por voluntad propia-cerré mis ojos con fuerza, pero al momento sentí un ardor recorrer mi mejilla, me había dado una cachetada, pero sentí un dolor más intenso en mi parte baja, me dio un rodillaso