Capítulo 5

120 12 2
                                    

Capítulo 5

Desde que se acabó la historia ya no fue lo mismo. Todos estábamos como apagados. No teníamos ganas de hablar y mucho menos de bailar y cantar.

Yo estaba más que preocupada por el tema de que ese chico se llamara igual que mi compañero de clase en mates. Podría ser otro, hay gente que tiene el mismo nombre. El problema es que cuando me lo describieron era exactamente igual que él. Ahí fue cuando me empecé a preocupar. Es imposible que sea él. Esto no es ninguna serie de fantasmas como por ejemplo Entre Fantasmas. Esto es la vida real, y eso es lo que me preocupa de verdad. Es imposible que pueda ver ¿fantasmas?

Al cabo de poco tiempo me despido de ellos y me quedo sola en casa. Mi madre está en casa de mi tía al saber que iban a venir amigos. Un gran detalle por su parte. Recojo las cuatro cosas que quedan y subo a mi cuarto para irme a dormir. Me coloco el pijama y me pongo en modo bola en la cama con las sabanas por encima.

A media noche me despierto inconscientemente y abro los ojos. Veo a una persona sentada en la silla que hay frente al escritorio y a continuación grito. Menos mal que estoy sola en casa. Rápidamente enciendo la luz de mi habitación y al fijarme me doy cuenta de que solo era ropa. Además, de la forma que esta puesta ni tiene forma de persona. Me encanta lo miedica que puedo llegar a ser con temas como estos.

Me giro para volver a mi cómoda y calentita cama y lo que veo ahora sí que es una persona, o eso creo yo. Lanzo otro grito y doy un paso hacia atrás. Pobres vecinos, lo que tienen que aguantar. Con un cojín que cojo del suelo a modo de escudo me fijo más en esa forma. Es ¿Tris? No por favor. Ahora no.

-Como continúes así vas a despertar a todo el vecindario –dice con una risa en su cara.

Yo no contesto. Mi cerebro está bastante ocupado pensando en miles de cosas. ¿Y si de verdad él es el Tristan Evans del accidente? No puede ser. La gente no ve fantasmas. Eso va en contra de la naturaleza de la humanidad.

-Vamos llevas deseando que te hable en todas las clases de mates y ahora que te hablo tu eres la que no dices nada –continua mientras se acerca a mí.

-¿Qué eres? –digo lo primero que se me pasa por la cabeza.

-Oh vamos eso ha sonado demasiado como Crepúsculo. Pensaba que no eras de esa clase de chicas. ¿De que eres más de vampiros o hombres lobo?

Le sostengo la mirada y ni él se mueve ni yo me muevo. Estamos los dos parados en medio de mi habitación sin decir ni hacer absolutamente nada.

-Aún no me has contestado – respondo mirándolo fijamente

-Vamos Alison. ¿Enserio lo quieres saber? –contesta caminando directo hacia mí.

A medida que él avanza yo voy retrocediendo hasta chocarme con mi escritorio. Al ver que no tengo ninguna escapatoria, abro el primer cajón e introduzco la mano dentro. Rebusco entre papeles y diferentes objetos hasta encontrar lo que estaba buscando. La navaja de mi padre. Mi madre quería que la tirase, pero nunca se sabe cuándo te irá bien. Aunque sea para defenderte de un chico que puede ser que sea un fantasma.

-Márchate de aquí ahora mismo –suplico con la navaja apuntando hacia él.

Tristan se empieza a reír. Una risa suave pero a la vez con un poco de nerviosismo. Lentamente se va acercando hacia mí. Cuando estamos a escasos centímetros de distancia se acerca a mi oreja y susurra con una voz segura:

-Venga mátame, yo ya estoy muerto. 

************

Huolas. Se que este capitulo es corto y caca de la vaca pero queria poner el siguiente cap y no estar tanto tiempo sin publicar nada. Así que este es el resultado :D

Y ya saben. Voten porfaa ( me siento youtuber diciendo esto :'') ) 

Venga, mátameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora