Chantajeada por la chica de Máscara

Chapter 2

|| Comienza la comedia.

Desde que soy un jodido perro faldero, no hay día en el que no deje de dormirme tarde y despertarme temprano. Se ha hecho una rutina bastante tediosa si me les sincero, No puedo culpar a la idiota de máscara, No, su nombre es Ririka, Pero, insisto en qué los apodos que le pienso son mejores..

Pero, La puedo culpar de tenerla en mis pensamientos. No estoy pensando en ella de una manera u otra, solo, me tiene.. intrigada..

Es bastante raro. Ella siempre actúa tan.. imponente. Pero, cuando estamos totalmente solas, En un salón o detrás de las escaleras, Es cómo un perro con la cola entre sus patas, No me molesta, pero, es bastante... Curioso.

Solté un suspiro antes de llevar mis manos hacia mi nuca, usando estás mismas junto a mis brazos cómo una especie de almohada, apreciando el techo, específicamente contando las estrellas fosforescentes en el techo.

— 6:32..— Me quejé antes de siquiera poder voltear a ver el reloj, en menos de 3 minutos sonaría mi alarma, y tendría que estar lista para salir de aquí

Toda la rutina debe ser hecha, Desayuno un café y un pan, me pongo mi uniforme, me alistó y bla bla bla, ¿Sería buena idea comprar una bicicleta? Sí, sería más fácil. Pero, no creo que mis padres quieran mandarme algo más de dinero

¿Qué decir de mi? Mis padres trabajan en el extranjero, así qué no hay mucha importancia respecto a ellos, No te preocupes, ellos no serán importantes en está historia.

En medio de mi rutina, escuché cómo alguien tocaba la puerta. ¿Quién mierda sería a esta hora? No he pedido nada por internet, mucho menos pienso tener visitas tan temprano.

Sin tomarle importancia, acomode el tipo corbatín que tenemos en el cuello, era más una tipo X, pero, no la puedo distinguir muy bien en verdad..dejando eso de lado

¿Oye, quién mierda sigue insistiendo en mi puerta? Dudo mucho que alguien haya venido a dejar correo, muy rara ves dejan un periódico fuera de mi casa ¿Quién lee los periódicos hoy en día? Bueno, al menos yo no los leo.

La rubia, ya un poco harta de estar escuchando constantemente cómo alguien molestaba en su puerta, se resigno y comenzó a caminar con lentitud hacia la puerta.

No era para nada lindo el escuchar cómo alguien te ponía a prueba tu paciencia con estar tocando el timbre constantemente

—¿Quién mierd-¿Eh?—

Oh vaya ¿Te lo esperabas? No era ni más ni menos que una chica de cabellera blanca y una máscara.

— Saotome, Buenos días.— Saludo cordialmente, antes de dar una muy pequeña mirada hacia el interior de la casa

—¿Qué diab-— Estaría dispuesta a completar su frase, pero, no sería posible, pues digamos que se retracto— Nunca acepte darte mi dirección ¿Cómo diablos haz llegado aquí?— soltó en un bufido

— Cómo vicepresidenta de el consejo estudiantil, solo he dado un vistazo a tu expediente. Perfectas calificaciones y una beca.— Oh, eso asustaba un poco

— Eso es abuso de poder, ¿No lo sabes acaso?— Alzó una de sus cejas, antes de recargarse en el marco de la puerta, esperando alguna otra palabra

—¿Lo es? Solo me preocupo por mi compañera..— Qué hipócrita habría sonado eso sí no fuera por qué está misma albina estuviese jugando con sus dedos

— Claaro, compañera..— Murmuró en un tono un poco bajo, antes de negar rápidamente y volver a ponerse recta — Ahora, responde mi pregunta ¿Qué mierda haces aquí?

El silencio abundó durante un par de segundos, antes de que la contraria siguiera jugando con sus manos

— Vine a verte..— Eso hubiera sonado un poco tierno, de no ser que son las 6:54 y probablemente Mary hubiera aprovechado el tiempo sobrante para hacerse un desayuno decente

—¿Tú?¿Querías verme tan temprano?— soltó un ligero bufido, antes de darse un pequeño golpe en la frente con su palma — En 30 minutos iba a pasar por ti ¿Por qué querrías verme tan temprano? Pudiste simplemente esperar.

Frunció ligeramente el seño, Sí, era un poco notorio qué no le agradaba el que alguien la interrumpiera pero, ¿Qué podía hacer? Aunque no se notará, ella era un poco exigente con el tiempo.

— Kirari me dejó las llaves así que pensé en recogerte yo a ti..— Hay que aceptar que esto es tierno. Pero, Digamos que saotome no lo toma de esa manera.

— ¿Por qué deberías hacerlo? Estoy bien con caminar.—

Lamentablemente eso pudo haber sido una orden.

— ¡No quiero!¡Sueltame!—

— Entra al auto Saotome.

Sí. Dos chicas se encontraban discutiendo por así decirlo, mientras una se agarraba con todo fuerza a la puerta de su casa, Otra se encontraba jalando de su cintura para que está pudiera entrar a su auto.

Pero, Ya sabemos quién ganó ¿Cierto? Pues llegaron a la escuela sana y salvas. A medias..