𝗘𝘁𝗲𝗿𝗻𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗔𝘁𝗿𝗮𝗶𝗱𝗼 - JJK - PJ◌ೄ

24.

Yoongi estaba sentado en su escritorio del despacho viendo el historial del dichoso mafioso que tenía que encontrar.

Tenía cargos por homicidio, portador de armas, venta ilícita de drogas y trata de blancas, ese hombre estaba totalmente quemado.

Suspiro frustrado, llevaba toda la noche buscando alguna pista de donde podría estar escondido pero lastimosamente no encontraba nada concreto.

Sus pensamientos fueron borrados cuando Kim Seonghwa entro a su oficina corriendo y con unos papeles en mano.

— ¿No te enseñaron a tocar la puerta? — preguntó Yoongi viéndole con su ceño fruncido.

— Olvida eso, te tengo buenas noticias.

Yoongi quito los lentes de su rostro y fijó su mirada en el hombre.

— Encontramos a Ilhoon.

— ¿Que? ¿Tan rápido?

Seonghwa asintió eufóricamente mientras le daba un papel con unas fotos a Yoongi.

— Está en Gwangju, al parecer está escondido con sus guardias en ese lugar pero como sabes fue fácil encontrarlo para mi. — se halagó.

— Hay que avisarle a Jungkook, tenemos que ir cuanto antes.

— Cálmate, primero, ¿Llamarán a la policía?

— Es obvio que si, tenemos que llevarlo a la comisaría donde Wheein está por lo tanto los oficiales lo van a reconocer.

Seonghwa asintió frunciendo sus labios.

— Entonces vamos donde los Jeon.

— Andando.

Ambos se levantaron tomando sus cosas para ir hacia sus autos en dirección a la mansión Jeon.

Habían encontrado a la persona que había estado calentándoles la cabeza.

En la mansión Jeon, todo estaba tranquilo, Jimin y Jungkook estaban en el comedor desayunando con su familia, Jihyo estaba comiendo con su mirada puesta en el plato y el dolor de cabeza con nauseas que la estaba matando, resultado de la borrachera del dia anterior, Mingguk estaba comiendo mientras platicaba con su tío Seokjin y Namjoon leía el periódico.

Jungkook se limpio su boca con una servilleta para luego llamar la atención de su hija quien rápidamente levantó su mirada.

— Que sea la última vez que vienes borracha a mi casa, no volveré a aceptar esos comportamientos tuyos ¿Entendido? — regañó Jungkook a su hija.

— Si, lo siento es que todo lo de Daniel me puso mal y pues me fui a desquitar con el alcohol, no volverá a pasar.

— Cariño — le llamó Jimin — No tienes que tomar esas medidas para desahogarte o como dices desquitarte, el alcohol más bien te hará mucho daño.

— Créeme, lo sé, no soporto la resaca.

— Vete a tu habitación, le diré a tu abuela que te haga una de sus recetas — Jimin le guiñó el ojo.

— ¡Pero papi! Esas cosas son horribles — chilló.

La señora Park apareció junto al señor Park cruzándose de brazos y ambos tomando asiento en la mesa.

— Pero galán al alcohol no le dijiste así, anda ve a darte una ducha tibia, en unos minutos te llevo tu té.

Jihyo volteo a ver a su abuela e hizo un puchero, se levantó de la mesa hacia su habitación.

Jungkook suspiro recostándose en la silla viendo de reojo a Jimin quien platicaba con su padre, sonrió viendo lo hermoso que se veía Jimin, estaba con su cabello un poco desordenado y su pijama de pollitos la llevaba puesta.