Blaine | Libro Uno

Capitulo 54

Buen0 gente. Wattpad me está cambiando los guiones.  . _. Mañana los arreglare.

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(...)

Después de que Henry entregó a las personas que los espían al castillo, vino aquí con el Duque.

No sería demasiado difícil encontrar mi ubicación porque tenía un dispositivo de rastreo.

Juntos tomamos el carruaje de regreso al castillo.

Estaba perdido en mis pensamientos todo el tiempo.

'¿Qué pasó?'

¿Por qué Andy conoce las tácticas de Zachary?

El nombre del chico es definitivamente Andy. La lista también decía claramente Andy.

Sobre todo, es muy débil.

Me temo que las sirvientas le darán una paliza.

Un caballero tan poderoso, sincero y reflexivo, no sería Andy.

Cuando estaba preocupado por eso, una mano tocó mi mejilla. Fue Isaac.

—Lo siento, debería haber ido aquí rápidamente.

—Está bien.

—Niño, ¿por qué siempre estás bien?

—¿Eh?

Isaac parecía realmente molesto.

He experimentado muchas cosas en la vida y siempre lo he pasado mal. Era algo normal para mí, así que la mayoría de las cosas no importaban.

Mi cuarta vida aquí es realmente satisfactoria. Pero estoy dispuesto a desertar, así que no quiero nada.

Isaac, que me estaba mirando, dejó caer los hombros. Los ojos de Henry estaban abatidos y el duque no dijo nada.

Cuando me bajé del carruaje, el sol se estaba poniendo.

Isaac y Henry volvieron a la habitación con una expresión sombría y estoy preocupado por los niños.

Entonces, el duque dobló las rodillas y me miró a los ojos.

—Blaine.

—Sí.

—Nunca vuelvas a hacer algo tan peligroso.

¿Se enojó porque estaba en problemas?

No quise decir eso, pero debe haber sido molesto para él porque casi me meto en problemas varias veces.

El sonrió levemente.

—Me alegro de que no te lastimes.

—...

—Descansar.

El duque, que así lo dijo, me acarició el pelo y se dirigió al castillo.

Toqué la mano del duque por un momento.

Se sintió extraño.

—...

No tengo tiempo para esto. Necesito encontrar a Zachary rápidamente.

De repente, me encontré con alguien.

—Uuhh...

Cuando me frotaba la frente después de un golpe bastante fuerte, escuché una voz familiar.

—¿Pequeña señorita?

Es el presidente.

—¿Qué pasa?