Momentos

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Ana podaba el césped mientras Mimi quitaba la mala hierba que rodeaba a sus flores, ambas tenían un pañuelo en la cabeza y tomaban limonada por el tremendo calor que había.

_Ana, ven aquí - llamó Mimi tomando una botella de bloqueador, la morena se acercó a ella quitándose los guantes - no quiero que te quemes - vertió un poco de la crema en sus dedos y la esparció en las mejillas y la punta de nariz de Ana.

_Ahora tú - Ana tomó la botella e hizo lo mismo, la rubia cerró los ojos al ver tal cantidad de crema que la morena vertió en sus manos - es para más seguridad - se rió.

_No habrá seguridad si entra en mis ojos - Ana comenzó a esparcirlo 

_Ya está.

_Aver - Mimi se acercó a un espejo que tenía al alcance - ¡Ay Anaaaaaa! - la nombrada no dejaba de reírse - parece que estoy usando la mascarilla de mi madre.

_Te ves hermosa.

_Si claro, mejor terminemos con esto. 
Ambas volvieron a sus labores tal y como estaban, pusieron música para mejorar el ambiente y disfrutaron de la tarde juntas.

_¡Amor, iré a tomar una ducha ! - avisó Mimi mientras subía las escaleras.

_¡Yo prepararé palomitas! - la rubia no podía hacer nada, Ana quería volver a ver la película que no pudo terminar de ver por haberse quedado dormida y estaba en todo su derecho.

Estaba a punto de quitarse su polera cuando escucho un grito en la planta baja.

Su corazón casi se detiene al suponer lo que habría pasado, eso no impidió que bajara las escaleras velozmente, provocando que casi cayera.

Frenó en la entrada de la cocina.

_¡Una cucaracha! - Ana estaba sobre de la cocina, completamente aterrada, había llegado allí de un salto.
Mimi soltó todo el aire del alivio, casi se le sale el alma del susto. 

_Es sólo una cucara....¡Ahhh vuela!  - se fue corriendo a la sala.

_¡Mimi no me dejes! - regañó.

_¡Salvate tu sola! - gritó desde la sala.

_¡Miriam Doblas Muñoz de Guerra! ¡Ven a ayudarme!

_¡Todavia no soy Guerra!

_¡Pero lo serás, así que trae aquí ese culo que me encanta y mata a ese insecto!

Una escoba se asomó en la entraba, seguida por la cabellera rubia de Mimi quien veía por todos lados.

_¿Donde esta?

_No lo sé - ambas buscaban con la mirada. 

_Dame la mano - pidió Mimi con cautela ante cualquier inconveniente, sus ojos no dejaban de recorrer el lugar, buscando al invasor.

Ana se abrazo de Mimi y bajo con cuidado.

_Creo que se fue - comentó Ana, escucharon un pequeño aleteo detrás de ellas, causando que pegaran un brinco y un pequeño grito - así tu hijo nacerá pronto - pronunció asustada.

Cuando verificaron otra vez, la maldita no estaba, tal fue la sorpresa cuando apareció de repente posándose sobre la nariz de Mimi.

La rubia estaba inmóvil, mejor dicho en shock , tener una cucaracha frente a tus ojos no es nada lindo.

Ana no se había dado cuenta de lo que ocurría, intentaba encontrar al bicho pero no estaba por ninguna parte, giró para preguntarle a Mimi si lo veía pero al verlo posado sobre la nariz de su novia dio un grito agudo, tomando la sartén y dándole de lleno en la cara de Mimi.

RETURN // WARMI Where stories live. Discover now