Liliana era su mundo. No hay nada que él no haría por ella, incluso si tuviera que matar a alguien solo para salvar su vida y tuviera una cicatriz para demostrarlo.
Ver como le arrebataban a su Anna para nunca regresar mientras vivía como un fantasm...
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Malcolm se despertó con un dolor de cabeza demencial. Podía sentir su frente húmeda y palpitante, pero cuando trataba de tocarla con los dedos, se dio cuenta de que no podía mover la mano y estaba envuelta detrás de él en la silla.
Sintió una textura áspera atando su mano. Abre los ojos con un gemido y casi le da un infarto al ver a un hombre sin camisa con músculos abultados y pelo fino y áspero en el pecho que lo hace lucir más brutal de lo que ya es.
Su rostro estaba levemente desfigurado en un lado, probablemente hecho por marcas de quemaduras y viejos rasguños con cortes esparcidos alrededor de su rostro. Su cuerpo también estaba lleno de cicatrices y respiraba con dificultad y el sudor cubría sus músculos haciéndolo lucir más definido y asustaba a Malcolm.
El miedo de Malcolm se intensificó al ver al hombre, sus ojos grises brillantes mirándolo mientras estaba parado frente a él con las manos a los lados, luciendo como si fuera a romper algo, probablemente él y por el aspecto de la habitación, todo estaba en mal estado. un desastre.
Jarrones rotos, arreglos florales, cuadros y algunos muebles pequeños están en el suelo, rotos y rotos. Probablemente sea el próximo; Malcolm habló para sí mismo.
Malcolm supuso que él era el 'Brahms no muerto' que tiene un vínculo peculiar con Anna. Ahora recuerda la conversación que ella tuvo con él antes, pero su atención se desplaza rápidamente a Brahms cuando su respiración se vuelve más difícil e inclina la cabeza para mirarlo.
La ira le pintó la cara y Malcom tragó más aire, rezando si había algún milagro en la casa que pudiera salvarlo en ese momento. ¡El tipo era increíblemente aterrador!
"¿Qué le hiciste a ella?" Brahms apretó los dientes y en realidad estaba tratando de controlar su temperamento, pero por la forma en que su cuerpo temblaba, Malcolm sabía que no sería por mucho tiempo.
"¿A qué te refieres?"
Malcolm tenía razón. En el momento en que terminó de hablar, Brahms pateó su silla hasta que cayó de espaldas todavía envuelto alrededor de la silla y le dolía la espalda por el impacto. Brahms apoyó la pierna izquierda en el borde del asiento de madera en el que estaba Malcolm. Brahms incluso tira de su cuello lo más cerca que puede y le grita en la cara.
"¿Dónde diablos está mi Anna? ¿Qué le hiciste? ¡Te destrozaré si la lastimas, bastardo! ¡Me oyes! Te mataré dolorosamente."
Sí, iba a morir pronto, pensó Malcolm para sí mismo.
"Yo... no lo sé hombre; apenas puedo recordar. Iba a mi coche cuando un chico..."
Los ojos de Malcolm se agrandan cuando recordó que estaba hablando con un tipo que se acercó a su coche y el loco comienza a tirar de la parte de atrás de su camisa y golpea su cabeza contra el parachoques de su auto.
Empieza a pensar mucho...
"Mira, todo lo que recuerdo es que me dirigía a mi coche cuando un chico..."
