Volveré A Ti ||Apolo; Fanfic||

CAPITULO 4

Gente, necesito que escuchen esa canción, y se imaginen que Apolo Hidalgo se las esta cantando mientras bailan *llora corazones*

Mi mente estaba tipo: Procesando...

Todo paso muy rapido: Llegamos a la casa Hidalgo, mi abrazo con Apolo, mi reencuentro con Claudia, Apolo poniéndome nerviosa, yo escapando para buscar un baño, después mi encuentro con Ares, Apolo ¿Enojado? Y ahora, siendo arrastrada hacia la cocina.

Cuando asimile un poco la situación, sentí un poco de rabia al ver la actitud de Apolo. Intente liberarme de su agarre pero mi intento fue en vano, el tenía más fuerza. El hecho de que el no quisiera soltarme me enfureció aún mas, jale mi brazo con fuerza y me libere, el se giro y nos miramos fijamente.

Tenía el ceño fruncido y los labios apretados, su mandíbula estaba tensa. Todo su lenguaje corporal apuntaba a que estaba furioso. ¿Porque?

—¿Que...? ¿Que te pasa?— Pregunte directamente, sin importarme mi tono fastidiado.

—¿Para que subiste? ¿No estabas buscando un baño?— Respondió, evadiendo mi pregunta.

—¿Que?— Estaba tan en shock, no entendía porque actuaba así, o sea, nos acabamos de reencontrar, ¿¡Porque actuaba así, que mierda!? Su actitud me trajo malos recuerdos...

—¿Tu eres la vecina de los libros? ¿Haz hablado más con Ares?— Su tono había cambiado un poco, pero aun así estaba tenso.

—¿Que te pasa? Estas actuando como un maldito novio celoso. No pienso responder tus preguntas, no así.

Dicho esto, pase por su lado y seguí mi camino hacia la cocina.

Al llegar al comedor pude ver a Juan y a mi padre, junto a mi madre y a Sofía.

—Cariño, pasa a sentarte ya es hora de almorzar— Me indicó Sofía.

Sonreí amablemente y me senté en el gran comedor. Apolo camino rápidamente y se sentó a mi lado, arrastre mi silla un poco, para estar lejos de él.

Una figura masculina bajo las escaleras y se acercó a la mesa, era Artemis, quien llevaba un traje elegante muy a su estilo de empresario poderoso.

—Buena tardes— Dijo Artemis acercándose a mi padre y a mi madre— Un placer volverlos a ver.

—El placer es nuestro, Artemis— Dijo mi madre amablemente.

Antes de sentarse, Artemis buscó con la mirada a una persona, a mi.

—¿T/n?— Dijo el con una gran sonrisa. Me levanté de la silla y le ofrecí.

—Si, la de siempre— Dije carismática.

—Lo sabía, el día que chocaste conmigo en la mañana, tu cara se me hizo bastante familiar, un gusto T/n.

Mis padres me observaron con el ceño fruncido, pero no dijeron nada.

—El gusto es mío, Artemis.

Nos sentamos en las cómodas sillas a esperar nuestra deliciosa comida, hasta que escuchamos unos pasos rápidos bajar las escaleras. Era Ares, el venía con una ropa bastante informal, lo que hizo que su madre torciera el gesto.

—Buenas tardes a todos— Dijo y se sentó despreocupado junto a Apolo.

Artemis y Juan querían asesinarlo con la mirada. Por el momento estábamos sentados de la siguiente forma: La mesa era rectangular, mi padre y Juan estaban sentados en lo extremos superiores, mi madre y Sofía estaban a sus lado. Yo estaba enfrente de mi madre, Apolo en frente de Artemis y Ares enfrente de Sofía.