Bebé post-guerra ♢ wangxian

┊☆ 2. Lan Wangji realmente no puede tomar un respiro, ¿eh?.

Resumen del capítulo:

Lan Wangji regresa a los Recesos de las Nubes y recibe una noticia muy emocionante de su pareja...
Entonces se enfrenta a las consecuencias de sus actos en forma de regaño de los miembros de su familia.

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Lan Qiren estaba esperando en la entrada de los Restos de Nube para recibir a sus sobrinos en cuanto llegaran.

Ellos despidieron a los jóvenes antes de acercarse a su tío.

"Shufu", saludaron.

"Xichen, Wangji, espero que la caza haya ido bien".

" Por supuesto, Shufu. Creo que fue una gran experiencia de aprendizaje para los jóvenes", respondió Lan Xichen. Wangji solía dejar que su hermano hablara cuando se trataba de... bueno, de todos los asuntos en realidad.

"Y Wangji, ¿crees que tu primera vez como acompañante ha ido bien?"

"Sí, Shufu"

Todavía era un poco joven para enseñar a los juniors, pero su alto nivel de cultivo le había permitido subir de rango mucho más rápido que la mayoría de los discípulos de Gusu Lan.

"Estoy seguro de que las últimas semanas les han cansado a ambos. Podemos continuar esta discusión más tarde cuando me lleven el informe de la cacería".

Lan Wangji era normalmente un hombre paciente, pero después de tres semanas lejos de su Wei Ying, estaba desesperado por recorrer a toda velocidad al patio principal hasta encontrar al hombre. Parecía que su tío estaba a punto de despedirse de ellos con normalidad, cuando de repente volvió a hablar.

"Wangji, deberías dirigirte al Jingshi, creo que Wei Wuxian tiene algunas noticias que compartir contigo"

Lan Wangji miró a su tío sorprendido por un momento. ¿Wei Ying estaba en el Jingshi? ¿Y su tío estaba de acuerdo con ello? Sintió que sus orejas se calentaban ligeramente al notar que su hermano ocultaba una sonrisa de complicidad. Todavía no le habían contado a Lan Xichen lo de su relación, pero en cierto modo no lo necesitaban. Su forma de leer a Wangji como un libro abierto aseguraba que los había descubierto hace mucho tiempo.

"Si Shufu, voy ahora mismo", respondió Lan Wangji, tratando de sonar tan sereno como de costumbre.

"Bien, Xichen y yo nos reuniremos allí poco después".

Lan Zhan se puso en marcha (a un paso respetable, por supuesto), reflexionando sobre las palabras de su tío. ¿Por qué se reunirían con él allí después? ¿Qué le iba a decir Wei Ying que necesitaba el consejo de su tío y su hermano?

Al entrar en el Jingshi, lo primero que vio fue a Subian en el porta-espadas junto a la puerta. Junto con un par de botas de Wei Ying en el suelo al lado. En secreto, le encantaba ver las pertenencias de Wei Ying en el Jingshi; su corazón saltaba ante la sensación de hogar de todo ello. Tal vez fuera un poco posesivo por su parte, pues necesitaba una prueba de que Wei Ying era un miembro permanente de su vida, de su hogar.
Pero también había estado a punto de perderlo en la campaña de Sunshot; su enfrentamiento final contra Wen Ruohan había sido intensa y agotadora y casi se cobró la vida de su amado.

Lan Wangji se estremeció al recordarlo. Hizo todo lo posible por apartar ese pensamiento de su mente: Wei Ying había sobrevivido, había aceptado casarse con él y estaba aquí, ahora mismo, en la casa de Lan Wangji.

Su atención se dirigió rápidamente a la pequeña mesa y a la sala de estar, donde su amante estaba sentado en un cojín, trabajando en algunos talismanes.