Era un sueño

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Estaba terminando de recoger el desorden de mi cuarto cuando escuche la puerta principal abrirse y unos pasos apresurados que se dirigían hacia mi, era Zoé.

-Li cambio de planes nos vamos desde hoy, prepara tus cosas.

-Ahora?

-Si Alice vamos te ayudo.

Me tomaron desprevenida pero no proteste, prepare una bolsa de mano y una maleta pequeña, solo eran tres días en el bosque así que no necesitaba más que unos pants y sudaderas. Mamá nos dio unas bolsas con comida, algunas cosas para limpiar la casa ya que no la usábamos hace rato y unas cobijas. De camino a la cabaña decidí ponerme mis audífonos y dormir un poco.

-Llegamos Li- dijo Zoé quitando uno de mis audífonos, trate de hacer tiempo fingiendo que sacaba y metía algunas cosas de mi bolso y sin darme cuenta pasé cinco minutos dentro del auto hasta que Zoé abrió la puerta del auto y me pego un susto.

-Que tanto buscas Li, saca tus cosas necesitamos ayuda con la limpieza.

-Busco mi libro pero supongo que lo olvide- le dije

Salí del auto y todo estaba como lo recordaba, algunos árboles estaban más altos, esta casa siempre me gusto mucho, de pequeña adoraba venir a jugar, tomar fotos con mi cámara, o caminar por el bosque hasta llegar a un pequeño lago, me pregunto si aun esta ahí. Inconscientemente me desvié hacia un sendero que estaba al lado de la cabaña, la voz de Zoé me sacó de ese trance diciendo

-Alice ven no quiero que te pierdas.

-Voy-le respondí.

Sería imposible que me perdiera acá, las veces que venimos con mi familia me propuse conocer cada uno de los rincones de nuestra propiedad consiguiendolo con éxito luego de perderme unas ocho veces, conocía todos los atajos posibles y podría regresar a casa aunque no hubiera camino por donde pasar, pero todo cambió meses atrás cuando estuve perdida por unas dos horas y en un estado en el que no podía pensar claramente.

Al entrar a la casa pude ver a lo que nos enfrentábamos, estaba super sucio, no recuerdo que estuviera así la vez que vine pero en realidad no puse tanta atención a como lucia todo.

Mason ya estaba sacudiendo algunos cuadros y adornos alrededor de la chimenea, mientras Zoé limpiaba la cocina, así que decidí limpiar los cuartos subí a la habitación principal sacudí los muebles y quite las sabanas de la cama para cambiarlas por unas limpias, baje y entre a la habitación que quedaba justo enfrente de las escaleras, era la habitación en la que solía quedarse Mason, tenía varios juguetes en unas repisas y unos balones de fútbol, baloncesto y béisbol, también trofeos, los limpie, quite las sábanas y las cambie por unas limpias, salí del cuarto y repetí el mismo proceso con las dos habitaciones restantes.

Terminé rendida en el sofá, soy fan de arreglar y limpiar pero esto era demasiado, Mason y Zoé estaban igual de cansados pero creo que el hambre les ganó porque prepararon unas avenas y eso estaban comiendo en el desayunador de la cocina también me prepararon uno a mi pero no tenía la fuerza para obligar a mi cuerpo levantarse  del sofá, por el rabillo del ojo logré ver que alguien se acercaba, era mi hermano.
-Ten mona, no te puedes dormir con el estómago vacío.- me dice poniendo la avena en la mesa frente a mí.
-Gracias- le dije con los ojos cerrados y dándole una sonrisa cansada. Bastaron solo algunos minutos para quedarme dormida, apenas probé la avena.

Tenía frío, lágrimas caían por mis mejillas, estaba acurrucada debajo de un árbol cuando alguien me tomó en sus brazos y... Desperté agitada, tranquila Alice solo era un sueño, un sueño, repetía una y otra vez en mi mente cuando noté que realmente alguien me estaba cargando, era Mason.
-Bájame-le dije pero me ignoró.
-¡Bájame ahora!- exclamé
-Si si ya voy- dijo Mason obedeciendo de inmediato-salí por un vaso de agua y te vi en el sofá, no quería que durmieras incómoda así que decidí llevarte a la cama ¿Qué te pasa Alice?-
-Perdón y gracias por tu preocupación pero no lo vuelvas a hacer.-le dije con uno tono frío en mi voz.
-Mona sabes que me puedes decir lo que quieras cierto? Estaré acá dispuesto a escucharte, cuéntame cualquier cosa desde la mayor de tus alegrías hasta la peor de tus tristezas, dime cualquier estupidez, siempre estaré feliz de escucharte.-dijo Mason tomando mi mentón con un dedo obligándome a mirarlo, solo asentí con la cabeza y entre a la habitación, las palabras de Mason resonaban en mi mente y aunque le quería decir el pésimo verano que había tenido las palabras se quedaban atoradas y nunca salían.

Un ruido fuerte me despertó, salí a ver qué pasaba eran Zoé y Mason jugando fútbol frente a la casa.
-Perdón Li te despertamos?-dijo Zoé
-Me tienen despierta desde las tres de la mañana- les dije entre risas, Mason se sonrojó un poco y Zoé se tiró una carcajada, Zoé y Mason tienen una vida sexual activa y yo tomé la pesima decision de dormir en la habitación junto a la de ellos.

No sabía realmente qué hacer, Zoé y Mason estaban disfrutando de todo tipo de actividades de pareja, despues de todo llevaban seis meses de no verse.

Mason es un chico al que le gusta hacer todo tipo de actividades, es muy inteligente y no le gusta perder su tiempo así que estudia cosas nuevas constantemente, el problema de ser muy inteligente es que por su desempeño todo tipo de universidades dentro y fuera del país le ofrecen becas, a las que Mason ni lento ni perezoso acepta, problema para nosotros que amamos que esté en casa; pero su más reciente obsesión es tratar de entrar el ejército, por lo que a estado los últimos seis meses fuera de casa, haciendo mas y mas pruebas para poder entrar, supongo que por eso está aprovechando cada momento junto a Zoé.

La incertidumbre de qué hacer en casa no era necesariamente porque no supiera que hacer, sino porque tenía miedo de ir a explorar como lo hacía antes y recordar;  meses atras aca habia sucedido lo que inundaba de tristeza a mi mente en estos días.

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⏰ Недавно обновлено: Oct 17, 2023 ⏰

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