Sweet creature | Drarry

Siete: 5201314

—¿Es en serio? Llegas una hora tarde.

Tras escuchar el reproche de Draco, Harry cerró los ojos, tomó un gran respiro e intentó serenarse. Un cúmulo de emociones luchaban entre ellas por tomar una posición en sus sentimientos. No entendía si debía sentirse deplorable por la gran presión que llevaba consigo, o reír. Entre sus pensamientos buscó el recuerdo dónde Draco le reclamaba por lo mismo exactamente un año antes y logró sonreír con nostalgia. Giró sobre sus talones y lo enfrentó con una mirada de disculpa.

—Lo siento, es que el profesor Dumbledore estaba enseñándome unas cosas.

Draco apretó los labios. Otra vez no. Harry era consiente de que Draco trataba de contenerse para no soltar un comentario aunque, algunas veces su inquietud era más fuerte...

—Harry, yo sé que tú quieres hacer esto pero, realmente me preocupas. Tienes que aprender a delegar, no puede caer todo el peso sobre ti.

Sin poder evitarlo, exhaló de forma ruidosa evidenciando lo fastidioso y cansado que le resultaba aquel tema.

—Y yo no quiero que alguien más tome en sus manos mis responsabilidades.

—¡No es tú responsabilidad, es eso lo que no entiendes!

—No quiero pelear, mejor entremos a la fiesta.

—No puedes escapar de esto.

—Draco, por favor.

En parte él también se encontraba un poco enojado con Dumbledore, pero por elegir ese momento para su reunión. Entendía que pasaba la mayor parte del tiempo fuera de Hogwarts, pero lo entendería mejor si le explicara al menos de qué trataban sus viajes. Todo era muy extraño. Sentía que caminaba sobre arenas movedizas. El problema de Harry era que debía comprender a los demás, pero los demás no se detenían ni un segundo a comprenderlo a él.

—¿Qué hacen aquí afuera? Vamos a esa fiesta.

Draco fulminó a Blaise por interrumpirlos, Neville en cambio se colgó del brazo de Zabini y les sonrió feliz. Ambos llegaban juntos.

—Fue buena idea esto de la fiesta en la sala de menesteres —opinó Neville, escuchando el sonido de la música viniendo desde dentro.

Blaise asintió.

—Recuérdenme felicitar a mini comadreja.

—¡Oyeee! —Neville le propinó un buen zape, obteniendo con ello una carcajada de Draco que logró aligerar el ambiente.

—Se llama Ginny —Harry se encargó de recordarle.

—Sí, como sea.

Al adentrarse en la fiesta supo que las cosas no se estropearon del todo con Draco cuando le permitió tomarle de la mano. Harry advirtió sus dedos entrelazarse con los suyos y se dejó guiar por él a través de la multitud.

—Nosotros iremos a ver si ya llegó Luna —les aviso Neville, para después perderse entre la gente, junto a Blaise.

Ginny, Luna y Astoria habían hecho un gran trabajo organizando la fiesta de Halloween. La música era genial, igual la decoración y la mesa de bebidas. Hasta el año pasado Pansy era la encargada de llevar a cabo los eventos en la casa de Slytherin, solo ella tendría sus razones para querer abandonarlo a último momento. La mejor parte de todo era que está vez no solo era exclusivo de Slytherin, veía a muchas personas de otras casas.

—¡Chicooos, miren quién vino! —se les atravesó Theo, gritando con mucho entusiasmo por encima de la música.

—Hola —los saludó Oliver, apareciendo detrás de Theo.