Héroe discriminado

Capítulo 33

Esto es completamente tenebroso.

Sentir nuevamente este tipo de presencia hace que quiera caer al suelo y rogar por mi vida.

Otro ser divino se encuentra en la aldea.

¿Será que es una vieja amiga de Aqua que vino a visitarla y a recuperar el tiempo?

Mentira.

No trates de engañarte a ti mismo, idiota. Ni siquiera puedes sentir la presencia de Aqua cerca.

Incluso, si fuese un viejo amigo de ella, este controlaría su presencia y no la desbordaría de esa manera.

- "chicas, nos quedaremos aquí hasta que lo que esté arriba se vaya"

Resistiendo un poco la abrumadora presencia, advertí a mis compañeras lo que haremos ante la situación.

Esto es muy cobarde ¿no? como sea. No quiero que esta tranquilidad termine por una mierda como esta.

- "¿Qué? ¿quedarnos aquí? es una broma ¿verdad? ¡mi familia debe de estar en peligro si se trata de un dios que se liberó del sello!"

Megumin, desconcertada empezó a cuestionar mi orden.

- "Lo sé, ya pensé en ello. Pero salir de aquí solo sería un suicidio"

- "¡No me importa! ¡yo iré a ver como está mi familia!"

Sostuve la mano de Megumin para intentar retenerla, pero fue en vano.

Las estadísticas de Megumin son superiores a las mías.

- "¡oye! ¡no podrás hacer nada si intentas salir así"

- "¡¡por lo menos haré algo!!"

* * *

Megumin, sin mirar hacia atrás, empezó a correr rápidamente hacia la salida del lugar.

- "¡¡¡Megumin!!! ¡¡¡no te atrevas a-!!!"

Y sin siquiera voltear y dar una respuesta, ella desapareció del lugar.

- "¿papá...? ¿no deberíamos de seguir a mi hermana...?"

Kazuma sintió como si una gran estaca le atravesara el pecho. Ver como Megumin desaparecía de su visión fue realmente un golpe muy bajo.

Cayó arrodillado contra el suelo cuando un sentimiento conocido para él volvía a su cabeza.

'¿me está abandonando...?' Kazuma sostuvo su cabeza mientras aquel pensamiento se repetía sin cesar.

Una y otra vez, sin descanso, aquella pregunta se repetía en su cabeza.

- "¿papá? ¡oi! ¡oyeeeee! ¡¿por qué estas golpeando tu cabeza contra el suelo?!"

Filo se preocupó por lo que veía.

Kazuma, su padre, empezó a gritar y golpear su cabeza contra el suelo rapidamente.