(5) ¿La corbata es de mi novio?

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Narra Mauricio

Me desperté en mi habitación, la luz que entra por entre las cortinas me molesta y me duele la cabeza, tengo nauseas. Trato de recordar lo que pasó ayer pero solo me duele más la cabeza. Solo recuerdo que fui a una fiesta. Intenté sentarme sobre la cama y todo a mí alrededor giró, ¿Por qué bebí tanto?

Estiré mi brazo aun estando acostado en la cama para alcanzar mi celular que estaba en el piso un poco lejos, quien sabe cómo llegó allí. No podía alcanzarlo así que me tiré al piso y por fin pude sujetarlo. Antes de prenderlo me percate de una corbata azul con líneas diagonales sobre mi mesa de noche, no recuerdo de donde salió. Desbloquee el celular, me molestó un poco la luz de la pantalla pero lo ignoré, ya que solo gracias a este podría recordar más fácilmente lo que había pasado, o por lo menos la mayoría.

3 llamadas pérdidas de mi mamá, 24 mensajes de WhatsApp y 7 notificaciones de Facebook. ¡Santo Cielo!, es la primera vez que tengo notificaciones de en Facebook después de una fiesta, ¿Qué hice ahora?

Ignoré las llamadas, pues ya estaba en casa y sé que mi mamá se enteró cuando llegué de la fiesta. Primero vi las notificaciones de Facebook, una era sobre que alguien cumplía años hoy, luego otra de los recuerdos de los años pasados, y, después, me encontré con lo que más me importaba: tres notificaciones de publicaciones de ayer. Una notificación sobre 8 me gustas en una publicación mía, otra sobre un par de reacciones en una publicación en la que me etiquetaron y por ultimo una sobre un comentario en una publicación que no recuerdo haber hecho. La abro y veo una serie de fotos, la primera de un chico de traje con una corbata idéntica a la que está sobre mi mesa, se ve su cuerpo pero no su cara.

—Oye Mau, mami dice que...

—Shh, no grites Melanie, me duele la cabeza —le susurré a mi hermana rápidamente.

—No estoy gritando, mami hizo hamburguesas, baja o me comeré todo... ah, espera, mejor no bajes.

Suspiré. Mi hermana puede ser un poco irritante a veces. Me doy un masaje suave en mi frente, de verdad me dolía mucho mi cabeza. Leí el comentario antes de ver las fotos, "que bien la pasamos Mau" de un chico llamado Giovanni; a ese chico lo acaba de conocer porque teníamos una clase juntos este semestre en la universidad. Nunca antes nos habíamos hablado directamente, ¿Por qué comentó una de mis fotos?... ¿y si...?, observé la corbata de nuevo, ¿y si él es el chico a quien le pertenece la corbata?, ¿Un chico me acompaño a mi casa que no fuera Andrés?, yo no pude coquetearle a otro chico estando ebrio, ¿o sí?

Veo las demás fotos rápidamente, mientras pienso que Giovanni tiene un cuerpo muy parecido al de mi novio, en ninguna otra foto sale ese chico de la corbata ni Giovanni, pero si salgo yo con la corbata en mis manos. No es posible que sea verdad, pudieron pasar muchas cosas, menos que estuviera con otro chico, ¿qué le voy a decir a Andrés?, ¿ya lo sabrá? tal vez ya ni siquiera quiera hablarme. Me siento triste por unos momentos, no quiero que mi relación con Andrés termine...

—¡José Mauricio! —Me sobresalté al escuchar como mi mamá gritaba desde el comedor en el primer piso.

El dolor en mi cabeza me impedía pensar en dos cosas a la vez, así que solo me enfoque en ir a desayunar, ¿o a comer?, creo que son las 12 de la tarde, la luz del sol parece muy brillante y lastima mis ojos.

—Mami, te dije que se veía horrible —habló mi hermanita cuando me senté en una de las sillas. ¿De verdad me veo tan mal?

—Hijo, ¿estás bien?, nunca te había visto así. Toma, come, te hará bien.

—Estoy bien mamá, solo estoy cansado. —observé la hamburguesa y me dieron nauseas— no sé si pueda comer esto.

Mi madre me mostró entonces un licuado de color verde, creo que era para que me sintiera mejor después de haber bebido tanto. Lo bebí y después vomite, nunca había tomado algo tan asqueroso. Aunque me sentí mejor.

Andrés & MauricioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora