[one side]

EIGHT

     La noche fue difícil para todos en casa, los niños se quedaron y junto a sus padres decidieron dormir en la sala, aunque por lo que escucho HoSeok a quien le costó bastante dormir, en algún punto de la noche se fueron a la habitación de TaeHyung. Si bien estuvo buen rato con los ojos abiertos y oídos atentos esperando volver a tener alguna interacción con TaeHyung, su mente no dejaba de pensar en las palabras de su tía.

Le había dicho que al día siguiente tratarían de hacer que TaeHyung regresara, pero no le dijo cómo, no tenía ni idea de cuál era su gran plan para recuperar a su novio y traerle de vuelva con su familia. Por ello hasta dudaba de contárselo a sus amigos que estaban muy al pendiente de la situación escribiéndoles a Jimin y a él.

Pero si lo que decía su tía era verdad, en menos de 24 horas tendrían de vuelta a TaeHyung, en casa, recuperándose luego de un evento tan traumático en ayuda de su familia y amigos, y por supuesto, HoSeok. Tenía que confiar en ello, con tanta seguridad como la que mostró su tía al reunirles en la sala por la mañana y hablarles a todos.

—Sabemos que TaeHyung es capaz de comunicarse con ustedes y viceversa, es bueno, también por lo que sabemos no se ha vuelto agresivo, ¿O notaron algún cambio en sus interacciones?

—No es como que hallamos hablado tanto con él, en realidad —suspiró su padre—, pero puedo notar que es mi hijo quien me habla, y que solo está muy asustado.... Como nosotros.

—Es importante reconocer que sigue siendo el mismo, si demostrara actitudes no propias de él sería preocupante. Son buenas noticias entonces —sonrió para los padres—, estuve considerando y pensando mucho sobre esta situación en particular, comparándola con sucesos que he vivido anteriormente para así saber qué debemos hacer.

—¿Ya ha visto esto? —cuestionó la madre de TaeHyung sin ocultar su asombro al verle asentir.

—Lo que sucede es que algo quiere adueñarse de la vida de su hijo —no pensaba entrar en detalles innecesarios que solo harían mortificar más a los padres y a HoSeok—. Véanlo de esta manera, es una trampa, como no tiene tanto poder ese ente en el mundo terrenal se llevó a TaeHyung a un lugar en el que ninguno de los dos tiene poder, pero en ese espacio le agotara mental y físicamente, dándole más poder. Si hubieran reconocido cambios significativos en él, significaría que ya están derribándolo.

» TaeHyung es fuerte y ha mostrado resistencia, nos ayudará a traerle de vuelta.

—¿Y eso cuándo será? —precisó saber el padre de familia.

La respuesta les brindó un gran alivio a los presentes —Esta noche, entre más cerca sea de la hora en la que ocurrió su desaparición, mejor.

Así quedó sellado. El día continuó como una mañana tranquila en la que mientras intentaban comunicarse con TaeHyung, sin éxito, se preparaban para la esperada noche. Nuevamente los niños fueron llevados a otro lugar, JiMin amablemente propuso su hogar donde podrían entretenerse con el hermano menor del joven de grandes mejillas.

La mujer les aseguró que no habría necesidad de nada más que la fuerza de todos y su unión, pero la madre de TaeHyung decidió colocar algunos objetos bendecidos en la cama de su hijo, donde rezó y al final, dejó una veladora frente al espejo de su tocador.

El reloj de la casa marcaba poco después de las 6 de la tarde, HoSeok junto a JiMin atendían una videollamada con SeokJin, poniéndole al tanto de la situación mientras los padres de la familia escuchan atentos a Helu narrarles algunas de sus experiencias, todos en lo suyo cuando el sonido de una puerta azotarse sobresaltó a todos. No había nadie más en casa, y el azote de esa puerta fue la del baño. El silencio de su sorpresa y expectación se rompió con el sonido del cristal estrellándose, eso y un grito lleno de dolor.

TaeHyung.

Indudablemente ese alarido pertenecía a TaeHyung, así como los sonidos que siguieron que eran más gritos y quejidos. Los más cercanos eran HoSeok y JiMin, pero no llegaron primero, esos fueron los padres del chico atrapado que gritaba lleno de pavor —¡NO ABRE! —gritó la madre de TaeHyung apenas se percató de que la puerta estaba asegurada, gritó y lloró, empujando inútilmente la puerta de madre en ayuda de su esposo— ¡HAGALO SALIR!

La orden que iba a Helu no le tomó por sorpresa, ella misma estaba pensando en qué podría hacer pero lo que sentía en ese momento era demasiado fuerte y abrumante, emociones tan fuertes que podían asfixiarle y no sólo hablaba de la desesperación de los padres, también notó un dolor desgarrante provenir de dentro del baño. Retrocedió y se cubrió el rostro, mareada.

Aunque no decía nada, sus gritos comunicaban el terror y agonía que estaba experimentando TaeHyung, helando la sangre de los presentes también porque los gritos se mezclaban con cosas rompiéndose —¡NOOOO!

Justo cuando gritó eso, la puerta cedió y se abrió de golpe casi provocando que la madre cayera hacia adentro, de no ser porque HoSeok alcanzó a sostenerle. El dolor expresado por gritos y golpes había parado, solo quedaban respiraciones agitadas y ligeros sollozos mientras veían el baño destrozado.

El espejo roto, varios productos de la familia se encontraban en el suelo, pero lo peor era la sangre, manchas de sangre que aunque eran pequeñas, hicieron que la madre de TaeHyung se desmayara. Entre HoSeok y el padre de TaeHyung le sostuvieron para dejarla cuidadosamente en el suelo, ellos se encargaron de hacerle reaccionar mientras Helu veía todo sin interferir, como JiMin, solo que este último estaba llorando.

—Esto es peor de lo que creí —dijo al fin de un rato la tía de HoSeok, cuando ya la madre de Tae había despertado y se recuperaba lentamente. Helu se acercó a los padres y tomó sus manos, decidiendo hablarles con sinceridad—, le está hiriendo, debemos actuar rápido.

—¿Ahora? —preguntó JiMin, sintiéndose tanto nervioso como ansioso, así como se sentía toda la familia.

—No ahora mismo, tenemos que tranquilizarnos y prepararnos, tenemos que ser fuertes, y prepararnos para lo que sea.

Cada vez estaba más cercano el momento en el que se reencontrarían con TaeHyung, aquello les alegraba pero era innegable el aura tensa en el hogar pues nadie sabía que iba a ocurrir y si estaban preparados para ello. Pero no había momento para reflexionarlo y prepararse mucho, TaeHyung tenía que regresar lo antes posible.