Las Crónicas de Narnia: El Príncipe Caspian (Peter Pevensie & tú)

Capítulo 16: El gran plan

POV _____

–¿Entonces están juntos de nuevo? Pensé que estabas enfadada –Ed me susurra mientras nos dirigimos afuera.

Bien, eso es verdad. No mentiré que no estaba segura al principio... perdonar a Peter tan fácilmente, después de unas pocas (aunque no pocas realmente) tiernas palabras. Pero... él fue genuino. Lo podía percibir claramente en el tono de su voz, la expresión turbada de su rostro, la profundidad de su mirada, como si estuviera perdido en la memoria y el pensamiento. Ese era el verdadero Peter. Tal vez uno al borde de un acantilado, tratando de encontrar el camino de regreso a mí, pero... era él, y lo único que sabía que podía hacer era extender mi mano. No solo porque creo que cada palabra que dijo fue verdad, sino también porque lo amo y lo he amado durante años, cada día un poco más que el anterior. En algún lugar, en el fondo de mi corazón, supe que el momento en que me mostrara su auténtico corazón, volvería a sus brazos.

–Te contaré más tarde –le prometí a Ed–. Y, técnicamente, nosotros nunca...

Me quedé en silencio una vez que pude vislumbrar a lo lejos. Al principio, lo único que noto es movimiento, sin reconocer realmente la fuente de ello, pero a medida que presto más atención... veo a un grupo de soldados telmarinos que salen del bosque como hormigas en un nido. Cientos de ellos, marchando hacia nosotros en una ola; el sonido de sus pasos como una sinfonía espantosa de tambores. Todos están reunidos aquí: los Pevensie, Caspian y yo; mirando la abierta amenaza que los telmarinos nos acaban de mostrar. Y, en medio de todos ellos, está su rey, mirándonos desafiante, un orgullo tóxico emanando de su postura corporal.

Un escalofrío me recorre en horror. Quieren aplastarnos, erradicarnos, y básicamente acaban de mostrar cuánto poder militar tienen sobre nosotros. Nos superan en número y con creces.

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–Tal vez podemos intentar otra cosa –interrumpió Lucy.

Después de ser público al espectáculo de los telmarinos allí fuera, convocamos a una reunión de emergencia. Teníamos que acordar cuál sería nuestro siguiente movimiento. No podíamos atacar fácilmente por la fuerza bruta: nos superaban en capacidad militar. Nos vencerían fácilmente sin una buena estrategia.

Durante la pasada media hora, todos habíamos estado discutiendo sin llegar a una concesión. Un plan había empezado a formarse en mi cabeza cuando Lucy se me adelantó. Un plan en el que ella y yo habíamos concertado hace apenas unas pocas horas. Este sería un buen momento para llevarlo a cabo... con algunas modificaciones.

–¿A qué te refieres, Lu? –le preguntó Peter.

–Podemos ir en busca de aliados... en busca de Aslan –propuso la pequeña Pevensie, casi sin titubear y segura de lo que estaba diciendo. La actitud de la reina adulta que una vez fue y no la sombra de ella–. Antes de objetar, deberían saber que es un plan que _____ y yo habíamos acordado realizar primero.

–¿Qué? –Peter se volvió hacia mí.

No había rabia en sus ojos, sino confusión. Tal vez por tomar esa decisión sin compartirla con él, pero las circunstancias en las que la tomé eran diferentes a las de ahora.

–¿Por qué no nos lo dijiste?

Todos me miraban ahora también, desconcertados. Esperando una respuesta de su reina.