꧁ El fútbol nos unió - Misaki y tu ꧂

Capítulo 2

Capitulo editado

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Narrador omnisciente

- ¿Que te parece Wakabayashi? ¿Ya entendiste lo que ellos pueden hacer? - Preguntó Ishizaki, cruzandose de brazos y dándole una mirada orgullosa.

- Aceptaras nuestro desafío, ¿Verdad? - Pregunto el castaño con emoción.

- ¿Por que debería? No los conozco y vienen a desafiarme - Una mirada molesta cayó sobre los hermanos.

- Te hemos visto atajando los tiros de distintos capitanes, pensamos en desafiarte - Respondió la mayor de los tres.

Wakabayashi no contestó y sólo los miró en silencio, su rostro reflejaba curiosidad y molestia. Se sentía irritado al saber que unos jóvenes como ellos serían capaces de jugar así, no se veía seguro.

- ¡Capitán!

Un gritó llamó la atención de todos los presentes. Al mirar, el equipo Shutetsu se acercaba, mirando curiosos al trío que estaba en el otro lado de la calle.

- ¿Que pasa? ¿No se había ido a casa, capitán? - Preguntó un jugador, confundido -

- Llegan justo a tiempo - Wakabayashi volteó a ver a los hermanos - Admito que tienen un buen talento con la pelota, pero estan muy equivocados si creen que solo con eso podrían jugar fútbol. - Al ver la mirada confundida en los hermanos, sonrió - Si quieren desafiarme - Señaló a su equipo - Tendrán que pasarlos a ellos primero.

Los tres se miraron sorprendidos junto con el equipo, no parecían entender este conflicto.

- Solo así accederé, díganme si aceptan.

- ¿Capitán, por que hace esto? - Un jugador lo miró confundido.

- No pregunten, solo hagan lo que les digo

- Si esta bien pero...

- ¿Por que le preocupan esos niños, capitán? - Interrumpió otro jugador -

- ¿Y qué onda con la pelota? - Señaló otro jugador el objeto.

- Llegó a mis manos mientras entrenaba en casa, vino desde lo alto de la colina - Explicó Wakabayashi.

- Ja... No me diga que cree que fueron esos niños, capitán - El Shutetsu se rió incrédulos.

- No lo creo, así fue - Se justificó el capitán.

- Oye, escúchame bien - Mei interrumpió la charla - Mí hermano te retó sólo a ti, no a todo tu equipo, eso es abusarse.

- Esa es la única condición para desafiarme.

- ¡Eres un engreído y un abusivo! - Se quejó Ishizaki.

- Déjalo, debe tener miedo a desafiarlo solo - Se burló Mei.

- Chicos está bien, lo haré - Tsubasa les sonrió a ambos chicos.

- ¿¡Que!? ¿Vas a aceptar esa tontería, de verdad? - Ishizaki se veía sorprendido.

- Si no lo hago, no podré desafiarlo.

- ¿¡Tsubasa estás loco!? - Mei se acercó y tomó los hombros de su hermano, sacudiendolo - ¡Son un equipo entero contra ti, nunca enfrentaste algo así!

- Mei, cálmate - Tsubasa tomó las manos de su hermana - Yo puedo, ¿O acaso no confías en mí?

- No es eso, es que te sacan como tres cabezas.

- Eso no tiene nada que ver.

- De una patada de mandan a volar, no seas necio.

- No importa, si quiero que las canchas pertenezcan a la escuela pública debo hacerlo.