Más tarde...
La mujer llamada ¨Karla¨ salió de aquel bar encontrándose con severus.
Karla- Hola - dijo alegré.
Severus- dime la verdad, ¿Po qué aceptaste encontrarte conmigo? -
Karla- para empezar tu amigo es fastidioso, para seguir quería ver su cara, la cual fue muy graciosa tengo que admitirlo, y para terminar, me pareciste interesante - explicó.
severus - con eso es suficiente - sonrió de lado y ella de oreja a oreja - ¿Quieres acompañarme a comer? - extendió su brazo.
Karla - Por supuesto - tomó el brazo de él - Pero nos vamos en mi auto - señaló un bocho con el vidrio de atrás rota, pintura echada a perder y llantas oxidadas...
Severus - ¿Ese es tú auto? - dijo con tono de asco.
Karla - ese no, el de atrás - se dirigieron al lugar encontrándose con un lamborgini veneno negro, luces azules y llantas con toques igual azul.
Karla - camarera no es mi único trabajo - sonrió de lado orgullosa.
Karla con un botón de su llavero hizo subir las puertas, dentro todo era de cuero, volante negro y asientos igual negros, había una pantalla en la cual estaba el ¨menú¨ del auto.
Karla- sube - ordenó a severus.
Severus - am... claro - al subir en la pantalla se vio el rostro de una mujer tridimencional.
¿? - Hola mi nombre es sharon - se escuchó la voz robótica - ¿A dónde conduciremos hoy? -
Karla - sharon marca destino restaurante ¨Pinpoint¨ , por favor -
Sharon - claro el restaurante ¨Pinpoint¨ está a 18 kilometros con tiempo de aproximadamente 1 hora y 30 minutos -
Karla - Bien, vamos -
El auto comenzó a moverse. Salió del estacionamiento para adentrarse en la carretera.
Media hora después...
Aquella pareja en el auto lamborgini, solo se dedicaba a observar el paisaje sin dedicarse palabra.
Karla - Am... ¿Te gusta la música? - dijo llamando la atención de él.
Severus - Claro - dirigió su mirada al frente.
Karla - Bien - en la pantalla del auto se dirigió a la sección ¨Biblioteca¨ y presiono en el título ¨Corazón de niño¨, de inmediato la nota musical comenzó a sonar.
Severus - ¿Corazón de niño? - preguntó viendo el nombre.
Karla - si, a mi me gusta escuchar música de piano, de echo a penas estoy aprendiendo - él la vio.
Severus - te podría enseñar, si quieres - ella lo vio sonriente.
Karla - ¿Y qué me cobrará? -
Severus pensó, ¨¿Qué podría cobrarle?¨ pero solo una idea se vino a su cabeza, pero de inmediato la descarto eso sería una total locura. Pero luego se armo de valor y se atrevió a preguntarle, además, favor con favor se paga.
Severus - ¿Podrías ayudarme a mí? - dijo discretamente.
Karla - ¿De qué forma? - lo veía de reojo.
Severus - Saliendo conmigo más seguido -
Karla - am... esta bien, solo por que me caíste bien -
Sharon - Has llegado a tu destino -
Más tarde..
Ya habían comenzado a comer y ahora se dedicaban a platicar de sus vidas (obviamente severus no le había dicho que era mago).
Karla - ¿Quieres vino?, yo invito - él la vio y sonrió de lado.
Severus - Si es así, por supuesto - ella le sonrió.
Karla - Camagego - dijo con acento francés. El camarero se acercó.
¿? - Digame señorita, ¿En qué puedo ayudar? -
Karla - Quisiega un vino tinto del 57, pog favog -
¿? - Claro madam -
Karla - Gagcias - se retiró el camarero.
Severus - ¿Qué...? -
Karla - Son cosas que ahora no me gustaría hablar -
Severus - Claro -
Severus por instinto volteó a ver la puerta y vio a una mujer entrar, era de cabello rojo como el fuego, piel clara, ojos verdes esmeraldas y portaba un vestido rojo, junto ella estaba un hombre de cabello azabache, piel morena, ojos azabaches y vestía de traje negro, junto a ellos se encontraba un niño no más de 12 años parecido a su padre pero con los ojos de su madre y vestía igual un traje negro. Severus volteó a ver a Karla y con fuego ardiendo en su interior tomó la mano de Karla con seducción y luego la llevo a sus labios besándola delicadamente.
Karla - ¿Severus qué...? - fue interrumpida.
¿? - ¡Sev! - se acercó la mujer pelirroja - Hola, cuanto tiempo - solo veía al hombre.
Karla - acaso se conoceís - dijo con tono español.
¿? - oh hola soy lily, ¿Y tú eres? -
Karla - soy Quetzali - severus la vio - disculpad que pregunte pero, ¿De dónde se conoceís vosotros? -
Lily - una larga historia -
Karla - y dime, ¿Porqué decideís haberlo cambiado? -
Lily - ah pues yo... mmm, espero que me entiendas, aqui entrenos, que el dinero todo lo puede -
Karla - así es - lily sonrió - pero el dinero no compra la felicidad - sonrió de lado.
Lily - ah... yo, - se aclaró la garganta - bueno fue un gusto verte sev - lo vio - compermiso - se fue.