𝐀𝐍𝐆𝐄𝐋𝐒 𝐈𝐍 𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐀𝐓𝐄𝐑 ── jj maybank.

𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐖𝐎

               CASI UNA HORA MÁS TARDE, JJ Y BRIELLE se terminaron de vestir para ir a la casa de John B, estaban literalmente a punto de abrir la puerta para irse. De no ser que Chris, el padre de Brielle, los detuvo. 

—ustedes no van a ningún lado.— les dijo serio mientra los apuntaba con un dedo. 

—¿papá?— la rubia se dio vuelta y se sorprendió al ver a su padre ahí. Se suponía que no salía del trabajo hasta en una hora. 

—oh, sí. Papá.— se acercó a ellos. —ninguno de ustedes dos van a salir de la casa.— pasó sus ojos por Brielle y luego por JJ. 

—yo me... me... estaba a punto de ir a mi casa.— Brielle miró indignada a JJ mientras que movía sus labios en silencio diciendo la palabra "traidor". JJ la miró y se encogió de hombros. 

—no me mientas, jovencito.— JJ puso sus labios en una línea enojado al ver que el señor Williams no le creyó. —sé que querían irse a la casa de John B, pero eso no va a pasar. El huracán está por empezar.— Era por ley que JJ se quede en la casa de los Williams cada vez que ocurría algo así. Los padres de Brielle sabían cómo se podía poner la cosa en su casa, así que preferían que el chico se quede con ellos a que la vaya a pasar mal con su padre. 

Brielle rodó los ojos. —no me ruedes los ojos.— Chris la miró con advertencia. 

—¿podemos ir al menos a comprar algo a la casa de Don Omar? ¿o el secuestro también nos impide eso?— la rubia alzó las cejas sarcásticamente. 

—no podrían ni respirar si esto fuese un secuestro.— Chris miró a JJ, con advertencia también. Suspiró. —de acuerdo, vayan.— 

—¡si!— esta era su oportunidad de escaparse, cuando lleguen a la casa de John B ya no podrían ir a buscarlos. Brielle empezó a abrir la puerta, pero su padre la detuvo de nuevo. 

—pero Calvin irá con ustedes.— finalizó con una sonrisa, sabiendo lo que los jóvenes planeaban hacer. 

—¡papá!— 

—¡Chris, vamos!— Brielle y JJ se quejaron al mismo tiempo. El hombre los miró sonriendo. 

—no soy idiota... ¡ya sé cuál era su plan!— canturreo mientras balanceaba con sus piernas haciendo un pequeño baile de caderas mientras y los señalaba con su dedo al mismo tiempo que formaba una sonrisa. —¡Calvin! ¡acompaña a tus hermanos a la casa de Don Omar!—

JJ no pudo evitar sonreír, siempre le encantó saber que los Williams tenían sus puertas abiertas para él cada vez que lo necesitaba. 

el rubio se acercó peligrosamente al oído de Brielle y susurró: —gracias al universo que no soy tu hermano...— Brielle lo miró mientras se sonrojaba y le dio un golpe en el brazo. JJ se quejó mientras la miraba con una sonrisa.