Violentómetro [CH]

04

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Celar
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Amor -llamó el ucraniano a su novio

Dime florecita -dijo viendo el televisor

Quería saber si me acompañas a una reunión de amigos con Finlandia, Estonia, Polonia y Noruega? -pregunto esperando una respuesta positiva del más alto

Claro cielo, vamos -dijo y salieron de la casa

El camino fue silencioso, pero era un silencio entre cómodo e incómodo, entienden? Nadie hablaba, solo se escuchaba el tipo de la radio que anunciaba las noticias de último momento, llegaron a tan dichoso lugar, era un restaurante de comida rápida.

Hola Ucrania -saludo Polonia con una sonrisa en el rostro

Hola chicos -saludo de la misma manera

Un gusto volver a verte Canadá -dijo frío Finlandia

Igualmente -dijo con una sonrisa fingida

La reunión de amigos estaba siendo entretenida, pero Canadá no paraba de ver con una mirada asesina que decía "alejate de MI Ucrania si no quieres salir lastimado" a Estonia que platicaba alegremente con el ucraniano, el sabía que Estonia era novia de Finlandia pero aún así sus celos eran más y más grandes, Noruega se percató de esto y empezó a hablar.

No deberías estar viendo a Estonia de esa manera, sabes perfectamente que ella es novia de Finlandia -explicó tratando de calmar los celos del canadiense

Canadá no dijo nada ante los dicho por el noruego y se paró de su asiento y agarró fuertemente al ucraniano entre sus manos

Nos vamos -dijo con una voz firme y sería, algo que sin duda sorprendió a todos

A-amor espera, m-mi bolso -el canadiense hizo oídos sordos y se fue con Ucrania

Les pareció muy raro a todos, Canadá ya no era ese chico tímido y pacífico, que siempre se preocupaba por los demás, ese Canadá ya no existía.
Llegaron a su residencia y Canadá sentó fuertemente a Ucrania en uno de los sillones, mientras este se encontraba sollozando a lo bajo, por la gran fuerza que aplicaba el canadiense en su agarre en su brazo.

M-maplecito? -susurro asustado

Lo siento cielo, de verdad lo siento tanto -dijo abrazando a su menor, soltando "sollozos"

No te preocupes amor, los errores pasan -dijo devolviendo el abrazo

Gracias florecita -dijo

Así fue, Canadá había fingido todo, el relamente no estaba arrepentido de haber sacado a su novio a la fuerza, sus celos tomaron total control de el, sostenía el cálido cuerpo de su novio mientras este sonreía a sus adentros al escuchar un leve quejido de dolor por parte del otro...

Celar
22/06/2021