𝟷𝟶

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[PVD Rei]

3 MESES ANTES

-Chicas no lo olviden, el partido de mañana será el partido más importante que jugaremos. Tenemos que darlo todo...

Normalmente me gustaba escuchar los discursos de mi capitana. Azumi-san era bastante buena en eso. Pero esta vez por más que me concentrara no podía.

Mi mirada no podía despegarse de Iris. Ella estaba sentada en una silla al lado de la capitana. Podía sentir su dolor. Miraba sus manos, agarrando fuertemente la falda del uniforme de Nekoma. El flequillo de su cabello rojo ocultaba sus ojos pero aún así dejando notar las lágrimas que rodaban sobre sus mejillas.

Suotome Iris era sin duda una de las chicas más fuertes que había conocido. Aún en un momento así ella se controlaba intentando no ponernos más nerviosas.

Sobre todo a mi, aunque en parte me sentía responsable de sus lloros.

En el inicio de año ella me dijo que la operarían en la pierna derecha para eliminar un tumor benigno que había desarrollado y que por eso no podría jugar durante unos 4 meses. Pero esos cuatro meses se agrandaron a 6 y durante todo ese tiempo ella no pudo ni siquiera tocar una pelota de volei.

Una vez curada ella fue quien se esforzó más de todas nosotras, incluso más que Noa y yo quien dábamos todo en todos los entrenamientos para mostrar que si valía la pena que estuviéramos allí. Ella se quedaba todos los días por lo menos dos horas más y siempre era la primera en llegar. Unas semanas después que retomara nadie hubiera podido imaginar que no había jugado durante 6 meses. Y todo el equipo estaba aliviado porque la estrella del equipo podría jugar, hasta yo debo asumir que estaba bastante aliviada, nunca había competido para un título nacional.

Pero nada salió como esperábamos.

El tres de febrero, tan solo dos días antes de mi cumpleaños, mi hermano falleció y con el las esperanzas de volver a jugar algún día de Iris.

Mi hermano mayor, Kenji sin duda nunca había sido una persona muy amante de las reglas, para ser sincera desde que tengo juicio propio siempre el ha sido considerado como un "gamberro" todo lo contrario de mi hermano más mayor Hotaru que siempre ha sido de carácter tranquilo.

Ellos solo tenían un año de diferencia pero aunque se llevaban bien no se parecían en nada.

Con los 20 años que tenía Kenji, ya había pasado tantas noches en compañía de la policía que ni las podía contar.

No era un chico malo, todo lo contrario, se preocupaba mucho por mi Hotaru y su obsesión al violín y por mi. De hecho estoy segura de que yo era su preferida. El problema era que le gustaban las sensaciones fuertes. Siempre andaba metido en líos, en pandillas y en cosas ilegales.

Pero el prometió parar.

Cuando mis padres empezaron a trabajar más y por ende estar menos presentes en casa, el y mi hermano se empezaron a ocupar más de mi. Al principio todo iba bastante bien pero luego ellos empezaron a discutir, odiaba cuando lo hacían y cuando eso pasaba solía encerrarme en la habitación para llorar o llamar a Kuroo para que me haga reír.

Pero una vez la pelea fue a los puños, Kenji, el rebelde le reclamó a mi hermano de ser un egoísta, de pasarse el día encerrado con mis partituras y de no pasar tiempo conmigo, Hotaru, el mayor le reclamo el ser irresponsable y poner su vida en riesgo haciéndome preocupar.

Los dos decían la verdad, pero estaba demasiado asustada, era la primera vez que veía a mis hermanos pegarse, claro que no era la primera ver que veía a hermanos pegarse porque había pasado una gran parte de mi infancia junto a la familia Miya, pero ver eso en mis hermanos, que supuestamente eran adultos me enfado mucho.

Tal vez fue por la adrenalina o algo del estilo. Pero yo me entrometí y logre separarlos. A pesar de ser muy llorica por todo esa vez pude mantenerme firme. Y regañarlos a los dos por pelearse en casa.

La verdad es que ya tenía experiencia es eso puesto que siempre me tocaba separar a Osamu y Atsumu cuando ellos peleaban pero esa vez fue diferente. Fue más doloroso.

El caso es que después de esa pelea mis hermanos empezaron a cambiar, Hotaru, empezó a pasar más tiempo conmigo, cuando yo era pequeña el solía darme clases de piano y empezamos a hacerlo otra vez. Pero el cambio más radical fue el de Kenji, el empezó a ir a clases otra vez; a jugar volei conmigo más seguido, dándome consejos para mejorarme; el dejo de juntarse con sus amigos de mal influencia y hasta empezó a aprender a cocinar.

Fue muy gracioso verlo.

Y el mes de febrero llegó.

La fecha que más esperaba, mi cumpleaños siendo el 5 de ese mes.

Nunca me habían gustado las fiestas grandes, tan solo quería pasar una tarde en familia y comer pastel. Pero mis hermanos se empeñaron los dos en darme el mejor regalo. Hotaru, por el dinero ganado en sus conciertos podía comprarme lo que me apeteciera. Pero Kenji, había dicho dejado todo lo ilegal no tenía ninguna fuente de ingresos.

Y allí tomó la decisión que acabaría con su vida y que cambiaría totalmente la mia.








*・゜゚・*:.。..。.:*・*:.。. .。.:*・゜゚・*

Holaaa

Siento mucho que este capítulo sea más corto que lo normal pero siento que tenía que acabar aquí.

Espero que les vaya gustando la historia.

El miedo de perder | Haikyū!!!Where stories live. Discover now