×Amigos, siempre×

¡Sorpresa!

Nos dirigimos hacia la cocina y nos pusimos a cocinar.

Ingredientes:

√ Dos huevos

√Harina

√Chocolate

√Mantequilla

√Una pizca de sal

√Leche.

•Primer paso: Buscamos un bowl (recipiente) para poner nuestros ingredientes. Agregamos los huevos y la harina y comenzamos a mezclar. Cuando este todo mezclado agregamos la leche y seguimos batiendo. Derretimos la mantequilla por un lado y el chocolate por el otro y le agregamos la mantequilla. Mezclamos, y después agregamos el chocolate. Mezclamos todo y cuando tengamos una masa homogénea, le agregamos la sal, una pizca, prendemos el horno con ayuda de un adulto y agregamos el contenido en un molde. Por ultimo lo pusimos dentro del horno.

Esperamos y esperamos hasta que se olía el olor a chocolate y sacamos la torta. Me fije la hora y eran las tres de la tarde. Cuando la torta no estaba tan caliente le agregamos crema batida y caramelos.

–Esta riquisima-dijo Hiccup

–¿Como lo sabes?

–Nose, lo presiento. Oh, se esta haciendo tarde. Me tengo que ir. Adiós, y te traeré torta.

–Mas te vale Els.–me dijo dándome un abrazo– Nos vemos luego.

–Lo mismo digo Hic.–dije dándole una sonrisa mientras el se iba afuera a jugar.

Busque mi mochila y puse mi librito adentro. Una cámara de fotos y chocolates. La torta la llevaba en la mano, así que abrí las puertas y me fui en busca de Eugene.

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–Hola...-dije dando pasos inseguros. El lugar seguía igual. Con olor a humedad.-¿Hay alguien ahí?

–Hola Els-dijo Eugene apareciendo de la nada. Se acerco a mí con una sonrisa y me abrazo.

–Adivina que traje...

–No lo sé. Tu dime.

–Te hice un ¡Pastel!

–¿Enserio?-dijo sorprendido-¡Oh, gracias gracias gracias!-dijo dándome un abrazo apretado.

–Eugene...el pastel...-decía tratando de sacar las palabras de mi boca. Tenia fuerza.

–Oh lo siento. Ven vamos a comer.

Y eso hicimos. Nos sentamos y sacamos la torta. No teníamos tenedor ni cuchillo así que tuvimos que hacerlo a la vieja escuela. Con la mano. Era divertido, empezamos a charlar y a sacarnos fotos con la cara toda sucia. Después de terminar la torta (y si, le deje un pedazo a Hic)  nos fuimos a lavar las manos en un baño no muy lujoso que había dentro del orfanato. La cosa extraña es que nunca veía gente ahí dentro. Que raro. Bueno no importa, después de lavarnos las manos nos sentamos en el balcón de ladrillos donde lo vi la primera vez y veíamos como caía el sol. Me aburrí así que saque mi libro y me apoye en su hombro. El no estaba tenso, para nada, estaba feliz mirando el cielo.

–Hey Els...

–¿Si?

–¿Que haces en tu castillo?

–No tanto, leo y leo la mayor parte de mi tiempo.

–Que suerte tienes.

–¿Porque dices eso?

–Porque tú tienes una familia, un castillo, sabes leer y tienes todo lo que quieres. Tienes una vida por delante... Yo no tengo ningún futuro. Solo soy un campesino mas..No soy...nada.-deje de leer mi libro y vi como le caían lágrimas, de a poco sus rodillas se juntaron con su pecho.

Mi instinto hizo lo que debía hacer. Lo abracé con toda mi fuerza y yo comencé a llorar aún mas fuerte. El sí vale. Vale un montón, por lo menos para mí. Yo lo quería un montón. Lo quiero un montón.

–Elsa...-dijo entre sollozos- no...no llores. Levanta tu cabeza princesa, que tu corona se va a caer.

–¿Por que eres...así?-dije con una sonrisa y con mis ojos rojos levante la cabeza para mirarlo.

–¿Asi cómo?

–Tan bueno...siempre me preguntas como estoy. Te preocupas por mi.

–Porque eres la única persona en todo el mundo que cree en mi. Que piensa que valgo algo en este mundo. Te...te amo.-dijo con una sonrisa,pero después esa sonrisa se esfumo y se dio cuenta lo que dijo- No osea..ya sabes. Amigos, ¿entiendes?

–Yo también te amo-le digo recostandome en su hombro mirando como el sol se oculta- Y sí. Como amigos.