La Chica Del Ascensor. ✓ (Finalizado)

Capítulo 14: Impulso

Poco a poco sintió los labios de Mark tocando los suyos.

Era apenas un roce; por un breve momento Julia creyó que Mark se apartaría y se disculparía. "Solo un poco más" se dijo a si misma, abrió los ojos y vió los de él cerrados, hizo la misma acción dispuesta a disfrutar lo poco que quedaba de este beso.

Entonces Mark comenzó a mover sus labios.

Con lentitud al principió; Julia intentaba imitar sus movimientos, y creyó que lo estaba logrando pero Mark llevó una de sus manos a su cintura, apretandola contra él y sus labios se movieron furiosos exigiendo adentrarse en su calor.

Soltó un gemido con los devoradores labios de Mark consumiendola.

Mientras el beso se tornaba cada vez más apasionado, la mano de Mark buscó su piel, la apretó más contra él, llevando ambas manos a su cintura y acariciando su espalda baja. Mark logró levantar la blusa que usaba y acariciar su piel suave.
Solto otro gemido y llevó sus brazos al cuello de Mark para equilibrarse.

Mark subía sus manos de la cintura a su pecho, donde sintió la tela de su brasier. Ansioso por sentir sus pechos, buscó con las manos la manera de quitarle la chaqueta que llevaba puesta.

Julia entendió y apartó sus brazos para alejar su chaqueta y dejarla tirada en el piso; todo esto sin dejar de besarlo.

Cuando sus respiraciones empezaban a sentirse pesadas, Mark comenzó a besar su mejilla y su cuello.

Buscó con sus manos la forma de tocar sus senos, y en gesto travieso introdujo uno de sus dedos por el costado del brasier, acariciando la forma redonda que formaba su pecho.

Julia soltó otro gemido débil apretandose más contra el cuerpo de Mark.

Hizo lo mismo con el otro pecho y harto de la tela, jaló la blusa para sacarla por la cabeza de Julia.

Temiendo que ese movimiento la sacara de la nube de pasión en la que se envolvieron, Mark volvió a besarla con más fuerza haciendo que su espalda golpeara la pared con un poco de fuerza.

Con sus pechos cubiertos de la tela del brasier, Mark encontró uno y lo apretó, encontró el otro y lo apretó también, Julia soltó un suspiro silenciado por sus labios.

Una de sus manos exploró su estómago, sintió la tela áspera de los jeans y con ambas manos buscó el botón, lo desabrochó y lo bajó sintiendo la piel de sus caderas. Empezaba a sentirse ansioso.

Buscó desesperadamente el botón de sus propios jeans, y los bajó junto a sus boxers.

Julia detuvo el beso por un momento para ver que estaba haciendo. Cuando vió su miembro, abrió los ojos y estuvo a punto de decir algo que fue silenciado por sus labios.

La tomó de los muslos y chocó su cadera contra su miembro erecto. Más desesperado bajó los jeans de Julia hasta sus tobillos y ella se encargó de patearlos fuera.

Nuevamente la tomó de los muslos; la levantó para que estuviera a su altura, batalló unos segundos para bajar sus bragas y con un solo impulso la penetró.

Julia apartó su boca para soltar la bocanada de aire que esto le había causado, su pecho subía y bajaba, igual que la de Mark. Creyó que su cuerpo había aceptado la intrusión y estuvo a punto de intentar apoyar los pies en el suelo, pero Mark se retiró y se impulsó una vez más.

Buscó el cuello de Mark para sostenerse, pero este estaba apoyado sobre su hombro; entonces puso sus manos en su espalda buscando un soporte.

Podía escuchar las respiraciones de Mark, sus gruñidos, se impulsó una vez más, y otra vez y otra vez, cada vez con más fuerza y más rápido hasta que ambos sintieron que llegaban a ese punto.