Para Draco su vida había dado un giro drástico. Paso de ser uno de los magos más prestigiados a ser el título de las revistas de chismes para brujas sin oficio. Mientras la otra parte de ese desastre estaba completamente desaparecido Draco Malfoy se...
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AVISO:LA NOVELA ESTA EN EDICIÓN POR ESO APARECE UNA FORMA DISTINTA DE NARRAR Y LOS PUNTOS DE VISTA SERÁN DIFERENTES <33
Los días eran cada vez más largos y pesados. La ausencia de Harry se había dado a notar mucho en mi rutina diaria. Él estaba desde los buenos días hasta las buenas noches. Creo que nadie podía entender lo mucho que lo echaba de menos. Mi padre solo estaba molesto al igual que Zaza y no me lo tomo a mal simplemente se estaban centrando en lo que no era importante. Aún recuerdo cuando papá decidió ir a casa de los Potter para “Charlar con Harry” según él y Blaise tenían la teoría de que si Harry me explicaba el porque de las cosas podría entenderlo y cerrar esa etapa pero las cosas no son tan fáciles como parecen. Harry y yo no solo compartimos una historia, ahora esto va más allá. Esa noche cuando papá regreso mi corazón volvió a romperse con unas simples palabras.
—Él no está aquí, hijo. Sus padres no tienen idea de dónde puede estar.
Harry había huido y solo Merlin sabe dónde. El hombre que amo con todas mis fuerzas había huido sin dejar ni una sola carta. No sabía cómo sentirme al respecto, si bien ya no éramos pareja yo lo seguia amando. No mentiría, me sentía usado, como un viejo trapo sucio y usado.
Maldito Harry, desearía jamás haberte conocido.
¿Quién le da el derecho de entrar y salir de la vida de las personas cuando le d la gana? ¿Quién diablos se cree?. Pareciera que le importará un comino lo que sienten los demás. Tomo mis sentimientos y los tiro al bote de la basura como si fuera algo desechable, como si no importará.
“Pero después de todo el hubiera no existe y el pasado no se puede cambiar”
Habían pasado semanas de mi ruptura con Harry, no había salido de mi pieza desde entonces, ni siquiera había ingerido una comida completa desde aquel día. Había algo que me seguía atormentando ¿Cómo diablos le diría a mi familia que estaba embarazado?. Mi mente era como jungla, no sabía que hacer ni por dónde empezar. Tenía opciones pero no sabía si era lo correcto. ¿Abortar? Gracias a Merlin podía hacerlo pero no quería hacerlo. Estaba asustado pero feliz, supongo que mi pequeño ratito de sol sería el recuerdo de la intensidad con la que ame a su padre y tal vez con la misma que él me amo.
Esto me asustaba y emocionaba a la vez. Sabía que una responsabilidad gigante. Serían unos meses muy largos y haré que sean los más lindos que pueda después de todo por eso se le llama la dulce espera.
Quería hacer las cosas bien, para empezar debía darle la noticia a mi familia y empezaría por mi caja de Pandora (Pansy). Sería una tarea difícil hacer que Pansy viniera a casa sin decirle el porque pero esperaba lograrlo. Ya iban dos tonos y nadie respondía la llamada, estaba apunto de colgar cuando escuché su adorable voz.
—Hola Dragón de Pacotilla.
—Que adorable eres.
—Es un don de familia. Pero dime, ¿Cuál es el motivo de esta hermosa llamada?
— ¿Acaso no puedo llamar a mi mejor amiga porque si?
— ¿Qué quieres? No me insultaste cuando dije Dragón de Pacotilla — Me quedé en silencio- ¡Ay no! ¿Mataste a alguien?
— ¿Qué? No, claro que no Pansy.
— ¿Entonces?
— Ven a casa, te lo diré aquí.
— Quieres contactar a ese tipo ¿verdad?
— No Pansy, tampoco lloraré por él. Es algo más serio.
— Bien. Estaré ahí en un momento.
— Trae a Zaza contigo.
— ¿Por qué te empeñas en castigarme?
— Si, yo también te amo —sonreí al escuchar sus protestas y colgué el teléfono-
Pansy Parkinson, es mi mejor amiga desde nuestro primer año en Hogwarts, ambos conocimos a Blaise en tercer año y desde entonces nos habíamos vuelto inseparables. Estar con ellos ha sido la mejor decisión, no me veo sin esos dos y aunque son fastidiosos así los quiero más que a mi propia vida. Se que ellos amaran a mi pequeño tanto como yo.
Me acerque al espejo y alcé mi camisa. Mi abdomen ya no era tan plano como recordaba, había una pequeña curva al final. No podía creer que algo estuviera creciendo ahí. Lleve mi mano hasta el pequeño bulto y sonreí.
— Todo saldrá bien, mi pequeño solecito.
Creo sin dudas que esto es lo mejor que he escrito
