LAS MIL Y UNA NOCHE

Capitulo 18

Tras varias noches sin dormir, días tormentosos sin saber nada de Kerem,Bennu lo piensa no puede soportar más la idea de que Kerem no haya querido saber nada de ella cuando más lo necesitaba. Temblorosa, nerviosa pero decidida a  entregarle el sobre con su renuncia, se dirige hacia la oficina de él, llama a la puerta, duda un poco si pasar o no pero al final pasa con voz segura lo saluda soltándole de un tirón que desea hablar con él. Karem la mira extrañado accediendo a hablar con ella.

── ¿Qué pasa Bennu?-le pregunta sin percatarse nada.

──Señor  Inceoğlu, quiero renunciar a Biyampi, aquí tiene mi renuncia desde mañana...

Golpeando su mesa se levanta molesto: ── Bennu no digas tonterías, ¿renuncias? Desde cuando salió tanta formalidad, desde cuando soy señor Inceoğlu. Soy Kerem.

──No quiero causarte más problemas.

──No lo haces Bennu.

──Kerem tuviste problemas por mi culpa, además...

── ¿Qué dices, te vas a ir como si nada? Como si entre nosotros no hay pasado nada.

──Lo que pasamos fueron momentos malos y problemas. Kerem por favor no me hagas esto, yo ya lo pensé no puedo seguir trabajando sintiéndote tan distante.

── ¿Yo, distante?

──Hace semanas que no me hablas, ¿eso es no estar distante?

──¿As pensando en todo lo que tenido que pasar?.  Es cierto, quise que te rehabilitaras en un día te dejé sola cuando más me necesitabas, entiendeme tú a mí. Me pasaron muchas cosas. Estoy cansado.

──Que pronto te rendiste.

──Creo que merezco un poco de consideración, ¿No lo crees?

Posando sus manos en su cabello la acaricia muy despacio sin apartar sus ojos de ella, rozando con sus dedos sus labios se deja llevar por impulso y la besa.

─ No nos preocupemos por tonterías... ¿Me perdonas? –Pregunta él ya más relajado.

──Siempre lo he hecho. —Responde una Bennu más tranquila y feliz. Su cara ha cambiado lo abraza hasta que una llamada de teléfono los interrumpe.

Entrada la tarde ambas amigas tienen mucho trabajo que deben de entregar. Bennu habla con Sherazade sobre la reconciliación con Kerem, su amiga se alegra  por ella, pero Bennu está algo insegura. Recibe un llamada de Kerem para tomar algo, pero ella lo rechazada por el trabajo, tampoco lo quiere aburrir.

En el bar jugando al billar Kerem habla con su amigo del destino, está muy mal su corazón solo ama a Sherazade y en su mente está ella, le da asta vergüenza de  mirar a Onur a la cara, todo afligido le confiesa a su amigo que nunca pudo olvidar a Sherazade, está enamorado de ella. Su boda será pronto y él será el padrino, tendrá que actuar y presentar a Bennu ante los invitados como su novia, le harán preguntas que ni el mismo sabrá contestar. Y todo por el destino, un destino muy cruel que le ha jugado una mala pasada. Tan solo un milagro puede hacer que Sherazade deje de amar a Onur y se fije él. Pero su amigo intenta animarlo comentándole que olvide a Sherazade y ame a Bennu, ella no se lo merece, lo ama. Eso es lo que realmente le está abrumando el que Bennu sea una buena mujer y lo ame, pero disgustado con el mismo por no poderle corresponder como él quisiera.

Por tarde Nadide visita a Sherazade y Kaan, como siempre el niño se vuelve loco de felicidad cuando ve a su abuela. Sentadas tomando un café Nadide algo doliente le dice a Sherazade que al casarse tendrá otra familia y ellos pasarán a segundo plano en su vida. Sherazade  entristecida expresándole que para ella son su familia, pueden ver al pequeño siempre que quieran. Nadide le declara que Kaan heredará la casa de sus abuelos,  para ellos la quieren como una hija, nunca se debe sentir sola, ellos estarán en lo bueno y malo. Las puerta de su casa están abiertas para lo que necesitan. Ella agradecida la abraza dándole las gracias.