𝗣𝗥𝗢𝗙𝗘𝗖𝗬 The Cronicles Of Narnia

2:Cair Paravel

El grupo de chicos se encontraba en una playa, estaban confundidos pues no sabían si sus pensamientos e ideas eran correctas o no, pero Lucy lo sabía, le dirigió una pequeña sonrisa a Susan, Lily y Peter para después salir corriendo seguida de sus hermanos mayores.

Se quitaron todo tipo de prendas, suéteres, zapatos y calcetines estaban tirados por toda la playa, mientras que los hermanos Pevensie se  introducían al mar jugando y disfrutando del agua, Edmund se quedó quieto observando unas colinas, en ruinas enfrente suyo.

—¿Dónde creen que estamos ?— preguntó hacia su hermano

—¿Y tú dónde crees?—  le respondió Peter sarcástico

—Esque...yo nunca vi ruinas en Narnia— apunto las ruinas que yacían enfrente suyo.

Todos habían callado y miraban a dicho sitio donde el joven rey les había dicho, los cinco se miraron desconcertados. Lo más sensato que hicieron fue subir e investigar y explorar, se dispersaron por distintos sitios, Lucy llegó a una pequeña parte con un árbol detrás, la cual en tiempos pasados, parecía un balcón, donde daba vista hacia el mar sus ahora pequeñas islas.

—¿Quien creen que vivió aquí?— pregunto hacia sus hermanos, Susan se acercaba a ella y se detuvo al sentir algo frío en el suelo tocando la punta de sus dedos, era una extraña figura,  la analizo detalladamente y se dio cuenta de que era parte de una de las piezas de un juego de ajederz, la pieza hera hermosa de oro sólido y en su ojo tenia un diamante pequeño el otro se había caído

—Creo que nosotros— respondió un poco nerviosa

Los tres restantes se acercaron al sitio, Edmund rápidamente se acercó a Susan, viendo la pieza que tenía en su mano.

—¡Oye! Eso es mío, es de mi juego de ajedrez, fue un regalo de cumpleaños de Lily para mi—  hablo mirando la pieza

—¿Que juego de ajedrez? — preguntó Peter, sin comprender

—No tengo un juego de ajedrez de oro sólido en Finchlye ¿o si? — preguntó sarcástico a su hermano, mientras tomaba la pieza

—No puede ser— susurro Lucy mirando el lugar —¡Vengan! — tomo a Peter de la mano y lo guio a otras ruinas

—¿No lo ven? — preguntó a sus hermanos

—¿Que cosa? — respondió Peter aún sin comprender muy bien, Lucy resopló y comenzó a poner en cada lugar a sus hermanos donde antes, se encontraba sus tronos.

—Imagina Muros— le dijo a Peter, mientras ponía a Lily a su lado y a Susan del otro

—Y columnas ahí— volvió a decir, al mismo tiempo que ella se posicionaba en su lugar, cuando los Pevensie se dieron cuenta de donde estaban, se quedaron perplejos. Alfin sabían donde estaban.

—Cair Paravel — anuncio Peter, mirando el lugar.

Siguieron investigando, aunque sinceramente, Lily no se veía tan convencida, supo que tenia que confirmar que estaban en su antiguo castillo, en su antiguo hogar. El árbol que estaba detrás los tronos destruidos fue el primer indicio de la reina de que talvez ya no se encontrase ahí lo que necesitaba para verificar que en realidad estuvieran en Cair Paravel.

—Lily, ¿Que haces?— preguntó su hermano viendo como la rubia intentaba subir al árbol. —¿Necesitas ayuda?

—Nop — respondió inmediatamente, por qué no tuvo que escalar mucho para encontrar la antigua flecha que había disparado, sabia que estaban en casa.

Dejando de lado de que su hermana había bajado a salvo del árbol, Edmund se acercó a una roca que estaba partida en dos.

—Catapultas— susurro

—¿Que? — preguntaron sus hermanos que se reunían detrás de él.

—Esto no se derrumbó, Cair Paravel fue atacado— Continuo Edmund hasta que se acercaron a una pared que, moviéndose daba acceso a una puerta que estaba más bien vieja y podrida

—¿Es encerio? De todo el lugar, ¿esto fue todo lo que quedó intacto? — una vez que Peter y Edmund movieron lo que les obstruía el paso, Lily se quejó, pues no le gustaba para nada la idea de que su antiguo hogar hubiera sido destruido.

Decidieron abrir dicha puerta, eso fue fácil pues la madera ya estaba toda podrida, encontraron unas escaleras que daban a un sótano pero todo estaba oscuro

Peter comenzó a tomar un par de palos de manera, y rascó un poco su camisa del colegio para poder crear una antorcha y poder bajar con un poco de luz

—Supongo que...no traerás fósforos ¿o si? — preguntó hacia su hermano, mientras eroyaba la tela en el pedazo de madera

—No, pero...— decía mientras buscaba algo en el morral que traía consigo, sacando una linterna — ¿Esto te sirve?

Peter al ver que tenia una linterna, dejó lo que estaba haciendo y le sonrió.

—Lo hubieras dicho un poco antes — contestó divertido.

Los cinco se dispusieron a bajar, al hacerlo, pasaron por una vieja rendija negra y un doble piso que daba hacia sus viejos baúles.

—Increíble, miren todo sigue aquí — informo Peter, observando todo, enfrente suyo había cinco baúles con una estatuta de cada uno de ellos arriba, cada uno se acercó al suyo, a excepción del mayor.

—¿Eramos tan altos? — preguntó Lucy, mientras sacaba un vestido de su baúl, doble veces su tamaño.

—Bueno, entonces eras adulta— le respondió sinceramente Susan con una sonrisa

—A diferencia de 1000 años después, cuando vuelves a ser niña — interrumpió Edmund a ambas, dirigieron su vista hacia su hermano, dándose cuenta de que este, tenia un casco de una armadura que le quedaba un tanto grande, siguieron revisando cada una de sus pertenencias cuando la benévola se dio cuenta de que algo faltaba.

—Mi cuerno, debi dejarlo en la montura el día en que regresamos — hablo, viendo que el cuerno no se encontraba ahí.

Lily abrió su baúl encontrándose con varios escudos, dagas y distintos tipos de armas pero lo que llamó su atención fue su espada, era igual a la de Peter solo que un tanto más pequeña. Y tenia un pequeño collar de oro entre la empuñadura envuelta.

Peter se acercó a sus antiguas pertenencias y sacó su espada de su empuñadura, la desenvainó y leyó lo que estaba grabado en ella

— Con su potente rugido las penas habrán desaparecido, en cuanto los colmillos muestre el invierno estará herido de muerte —

Después Lily siguió

— La injusticia verá su fin,cuando Aslan vuelva por aquí —

—Cuando agita su melena la primavera llega— Lucy termino — Todos nuestros amigos, el Sr Tunmus, los castores...ya no están — con un hiliyo se tristeza en su voz

—Creo que ya es hora de averiguar qué pasa aquí —  dijo Peter para volver a envainar su espada