En tus manos

Parte 20 La oscuridad entra en acción

Wei WuXian corrió hacia la salida de la caverna y vio a una multitud se estaban acercando a su posición, por sus ropas eran los miembros de las sectas aliadas. Entre ellos, vio a Jiang Cheng delante de todo como represente de todas la sectas.

— ¡Jiang Cheng! No vengas. 

Su advertencia fue tarde. En el momento que elevó sus voz, de entre la tierra comenzaron a surgir varios fantasmas y atacaron a los cultivadores desprevenidos.

— ¡Venga aquí!—Wei WuXian sacó a chengqing de su cintura y una melodía comenzó llenó el aire, en poco tiempo, Wen Ning salió a la curva y se dirigió hacia los cadáveres feroces.

—¡Qué está pasando aquí! —Con Zidian en manos, Jiang Cheng destruyó varios ghoul y miró en dirección donde estaba Wei WuXian—¿No dijiste que podía controlarlos?

—No soy yo—Respondió Wei WuXian un tanto molesto —¡Te lo explicaré más tarde, ahora trae a todos aquí! No podrán ingresar en este lugar.

Jiang Cheng tenía sus dudas, sin embargo, se abrió paso con Zidian. El relámpago morado atravesó el asma negra de Yinling dividiéndola en dos permitiendo despejar un camino hacia donde estaba Wei WuXian.

Mientras tanto aquellos que no fueron heridos peleaban contras las apariciones dejando que los más débiles pudieran adelantarse. Entre ellos los miembros de la secta Lan colaboraron en grupo con los miembros de las sectas aliadas para derrotar a los enemigos.

El sonido de la flauta detenía los movimientos de los cadáveres feroces, pero no por completo. Wei WuXian frunció las cejas y un sudor frío bajó por frente De repente, una tonada más ligera acompañó su música. No necesitó mirar hacia un costado para saber que su esposo estaba acompañándolo.

La notas de guqin no solo siguieron el ritmo de Chengqing, sino que se deslizaba en formas de ondas por el aire y golpeaba con fuerza a los espectros hasta que todo pudieran ingresar al interior de la caverna.

—¿Explica qué mierda está pasando?— Jiang Cheng fue el único que quedó en la entrada.

—Caímos en una trampa —Wei WuXian no quería admitirlo, pero fue un descuidado.—Planearon traerlos aquí a todos usando a los jóvenes maestros para eliminarnos.

— ¿Quién?

Eso era lo que Wei WuXian quería saber. Negó con la cabeza y su mirada se enfocó en todos aquellos que estaban en el lugar.

Algunos se dieron cuenta que el ex patriarca YinLing lo miraba y se disgustaron.

—¿Por qué nos mira Wei WuXian?

— ¿Tienes algo que decir? — Dio un paso al frente Su She

—Nada, líder de la secta Su— Wei WuXian se hizo el desentendido y se colgó del hombro de Lan WangJi. — Solo encontré algo sorprendente que algunos salieron sin heridas de ese ataque, debo admitir que sus habilidades deben ser mayor que la de HanGuang –Jun.

Los de la secta Su se pusieron rojo de ira.

Wei WuXian era muy bueno haciendo enemigos de todo el mundo solo con unas cuantas palabras.

Solo unos pocos lograron entender su propósito, entre ellos estaba Lan Wangji, Jiang Cheng, Wen Qing, Lan Qiren y en las sombras aparentando estar indefenso Nie HuaiSang.

— ¡Deja de acusarnos falsamente Wei WuXian! —Gritaron los miembros de la secta Su proclamando justicia en el hombre de los dioses al ser agredidos con falsas acusaciones.

— ¡Secuestrarte a los jóvenes para tendernos una trampa! Estás planeado acabar con todas la secta ¡Cultivador demoníaco! Por eso nos trajiste a esta cueva.