⚜️Real life⚜️ (Park Jimin & Tn)

🔸10🔸

~Kim Tn~

–¡¿Tn?!

–Cierra la boca, se te van a meter las moscas. –dijo Jin.

–T-te ves muy bien. –halaga Jimin.

–Gracias. –digo tímidamente.

–Bien, yo tengo trabajo así que los dejo. –habla Jin y se retira.

Me miró de nuevo con ojos de asombro, como si no pudiera creer que en realidad era yo quien estaba frente a él.

–De verdad te ves bien, pareces... uh...

–¿Una niña? –pregunto.

–No, no, no me refiero a eso. –dijo rápidamente agitando sus manos.

–Tranquilo, a veces hasta yo me sorprendo de mí misma. –dije riendo levemente.

–Tus piernas son lindas. –soltó sin más.

–¿Q-qué? –pregunté algo nerviosa.

–Nada, olvídalo.

–El vestido te queda lindo.

–Gracias.

–Y te peinaste, ahora puedo ver tu cara.

–Bueno, Jin me obligó.

–No sabía que tenías hoyuelos.

–Pues sí, los tengo.

–Son muy lindos.

–Gracias. –dije sonrojada.

Se quedó mirándome de nuevo por unos largos minutos, mis ojos encontraron los suyos y bajó su mirada a mis labios lo cual me puso bastante nerviosa así que decidí cortar la tensión que había en el aire.

–¿Es normal que haya tantos reporteros? –pregunté.

–Siempre están ahí esperando por ver a alguien de adentro y si seguimos aquí seguramente empezarán a crear rumores sin sentido así que... vamos hay que entrar.

Ambos nos levantamos y una vez de pie me miró de arriba a abajo.

–¿Qué?

–Es que te vi más alta de lo normal.

–Oh, es por los tacones. –dije sonriente.

–No tenía idea de que sabías caminar en tacones.

–Tonto. –dije riendo.

Caminé detrás de él y entramos al palacio, atravesamos algunos pasillos y salimos hasta el jardín interno en donde nadie nos podría ver.

–¿Qué estás leyendo? –pregunté una vez nos sentamos en una de las bancas.

–Un libro. –dijo.

–Obviamente es un libro, me refiero al título del libro. –dije.

–Yah, sólo te quería hacer enojar. –dijo y lo fulminé con la mirada. –¿Qué? Enojada te ves sexy. –dijo guiñándome.

–Eres un fastidioso.

–Uno muy guapo.

–Sí, lo que digas. –dije riendo.

–¿Estás diciendo que soy feo?

–Yo no he dicho nada, tú mismo lo has deducido solo.

–¡O sea que sí me estás diciendo feo! –reí fuertemente por su reacción.

–Esto es inaudito. –dijo fingiendo enojo.

Ambos reímos por la escena que estábamos haciendo lo que provocó algunas miradas del personal del Palacio sobre nosotros, de un momento a otro Jimin se calló.