Capítulo 70.

589 70 79
                                    

”¡Luka!"

Mencionó exaltada la Bourgeois mientras se acercaba a él junto con el Lahiffe y la de mechas moradas para tratar de separarlos sin mucho éxito...

-¿Sabes por cuánto tiempo quise hacer esto, Couffaine?

-¡No y la verdad no me interesa!... ¡No debiste haberte metido con Chloé!

-Awww, ¡ahora resulta que eres un héroe sin capa!... ¡Tanto que hablas de la armonía y esas estupideces para terminar peleando conmigo!

-¡No soy ningún héroe, además te metiste con Chloé y eso no te lo voy a permitir!

-¡Ya veremos quién le gana a quién!

-¡Agh!... ¡Sueltame ya, Félix!

-¡No, pelea como hombre!

-¡Zoé, ayúdanos a separarlos!...

-No Chloé...—fingió estar nerviosa— Prefiero no meterme...

-¡Agg!

-¡Yo sé quién puede ayudarnos!... ¡Mamá!

-Félix, acaban de llamar a mi madre, no te gustará que ella llegue

-Uy, si, que miedo...

-¡¿Qué está pasando aquí!?...

Cuestionó la capitana mientras llegaba, causando que los que trataban de separarlos, se movieran para darle espacio, la cual no dejó pasar ni un segundo más y para tomar con fuerza a cada uno de un oído, haciéndolos ponerse de pie antes de separarlos...

-¡Auch, señora me está lastimando!

-Auch...

-En serio, suelteme...

-¿¡Van a dejar de estar peleando como viles animales!?...

-Si, mamá...

-Si, si, si, como usted mande...

La de lentes los miró antes de darles un último apretón para soltarlos, viendo como cada uno llevaba sus manos al oído que les dolía mientras la de mechas moradas, la Bourgeois y el moreno se acercaban al músico...

-Luka...

-¡Un apretón de orejas es lo menos que merecían!...

-Para su información, señora... Los animales son los únicos que tienen orejas, los humanos tenemos oídos

-¡A mi no me corrijas, Félix... ¿Qué haces en mi barco?!

-Mi primo me dijo que viniera...

-Bueno, quizá él te dijo eso, pero ahora yo te pediré que te vayas de aquí y no regreses más, cada que apareces hay problemas y sabes que no miento respecto a esto...

-Pero-

-¡Nada de "peros", —interrumpió— es mi barco y yo soy la capitana, yo decido quién se queda y quién se va de aquí!... Quiero que te vayas en este momento, por favor...

El de mirada verde esmeralda miró por última vez como la de mirada azul zafiro tocaba con preocupación el rostro del guitarrista antes de dar vuelta para comenzar a irse.

Llevaba varios segundos desde que se había ido, que no notó como había sido seguido por la neoyorquina, al menos hasta que la escuchó gritar, que fue cuando se detuvo para verla por el rabillo del ojo antes de restarle importancia y seguir caminando, hasta tener que detenerse porque ella ya se había puesto frente a él, impidiéndole el paso...

"Green" . | Historia Lukloé.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora