Capítulo 4

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La mañana pasó rápido, entre clases y con la imagen de un alfa de hermosos ojos azules rondando en sus pensamientos y él tratando de reprimirlos con Histología, Biomecánica y Anatomía.

El rizado se encontraba en una clase de Anatomía con la profesora Green, la señora era una omega que pasaba los cincuenta años y jamás paraba de hablar, era como una cotorra.

Anatomía era una materia hermosa, la amaba. Conocer todo, cada estructura saber su fisiología, cómo algo era de tal forma para que luego suceda esta otra. El cuerpo humano era increíble y el amaba estudiarlo.

La clase llegó a su fin pasadas las horas del mediodía, debían ser las dos de la tarde. Tomó sus cosas saliendo del aula. La última comida que había ingedido había sido una manzana y un té a las 7 de la mañana, su estómago rugía tenía que conseguirse algo para comer pero ya.

Se acercó hacia la cafetería de la Universidad observó si quedaba algo en el menú del día que le apeteciera para comer. Cinco minutos después estaba saliendo de allí con las manos vacías, todo lo que ofrecián le había dado asco, raro en él que jamás despreciaba una comida pero esta vez se le había hecho muy tarde y no quedaban más que unos tallarines con salsa rancia.

Pensó un momento que haría porque no quería volver hasta su casa, se desmayaría en el camino y Marcus de seguro estaría ocupado haciendo algo como para pedirle que lo lleve. En ese momento recordó la cafeteria de libros quedaba a un par de calles de la universidad y seguro podría comer algo digno.

Comenzó su camino hasta allí mientras le mandaba un mensaje a su amigo para preguntarle dónde era que estaba y que tendría otra clase a las tres treinta p.m. Maldita materia Psicología Médica.

Tras caminar unos doscientos metros llegó, sentía que podría comerse media cafetería. Pasó entre las mesas para conseguir un buen lugar no tan cerca de personas, quería un poco de silencio sin olores.

Tomó asiento en una mesa un poco apartada de las otras cinco personas que estaban en el lugar, sacó sus libros para leer un poco sobre el tema que hablarían en su siguiente clase. 

Luego de un momento un camarero, que no había visto la anterior vez, se le acercó. Al tenerlo cerca pudo notar que este era un omega por su horrible dulzón aroma, olía a arándano, le iba a causar una jaqueca. Trató de no mirarlo mala manera cuando el chico rubio lo saludó cordialmente con una sonrisa y le preguntó qué iba a pedir. 

Ordenó una ensalada de zanahoria, lechuga y tomates cherries ya que se sentía un poco pesado de estómago como para comer mucho o algo grasoso. Durante la espera continuó con su lectura en soledad y silencio.

Había avanzado unas páginas cuando le sirvieron su comida y de la mejor manera que pudo sonreir, ya que era el mismo mesero de antes, agradeció.  

Estaba disfrutando de su comida cuando escuchó el sonido de una notificación de su celular, lo tomó para observar quién era y vió que Marcus le había le respondido.

Marcus: Bueno H, no voy a poder irte a buscar estoy en el departamento a todo lujo de Louis, seguimos con el bendito trabajo. 14:13 p.m.

Así que el alfa no solo era hermoso si no que también tenía un buen apartamento, el rizado mordisqueó un poco sus labios pensando que escribir y se decidió por algo simple. 

Harry:  Oka : ) 14:14 pm

Luego de eso el rizado continuó degustando su liviano almuerzo hasta acabarlo y siguió con el estudio. 

No había podido terminar de leer otra página cuando alguien le tocó el hombro y se sentó en el lugar frente a él.

Elevó la vista de las letras negras encontrándose con la morocha de ojos celestes que había conocido la anterior vez que estuvo en esa misma cafeteria. Le sonrió de manera amigable y que sea una beta era maravilloso así no se le revolveria el estomago con un dulce aroma.

Let it be - ls - omegaverseМесто, где живут истории. Откройте их для себя