꧁"El amor existe con ausencia de eternidad.
En el primer momento de un encuentro de amantes, hay una afirmación de amor.
Psicológicamente, locura, vacío, pánico, delirio de que el momento durará para siempre.
Estoy atrapado por...
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Shuijing
Eran alrededor de las 8 de la mañana y acababa de salir de la ducha cuando sonó mi teléfono. Lo miré y era Meizuo.
"¿Hola? ¿Zuo?" Respondí con una sonrisa.
"¿Hola? Buenos días Shuijing", respondió en un tono alegre.
"Buenos días, ¿qué pasa?" Pregunté mientras me cepillaba el pelo.
"Bueno, me preguntaba si querías pasar por la Universidad de Mingde y almorzar conmigo, ¡con nosotros! ¡Con nosotros! ¿Hoy?" Tartamudeó de lo que me reí.
"Seguro Zuo, aunque Jiejie va antes que yo, me dijo que quería ver a Lei después de que él practicara con el violín". Respondí.
"Está bien, iré a recogerte en 10 minutos. ¡Nos vemos princesa!" Respondió con una carcajada y puse los ojos en blanco.
"Ustedes realmente tienen que superar ese apodo. Usé esa tiara una vez y estaba delirando por el gas de la risa, ¿recuerdan? ¡Me acababan de sacar las muelas del juicio!" Dije de vuelta mientras gemía mientras Meizuo se reía a través del teléfono.
"Bueno, desfilaste y llamaste a todos campesinos. Sin mencionar que pensabas que Ximen era un caballo y saltaste sobre su espalda y le dijiste que te llevara a tu mágico castillo de azúcar". Él respondió, su risa se hizo más fuerte.
"¡Está bien, adiós Zuo!" Dije con una carcajada mientras colgaba el teléfono.
Me sequé el pelo, lo cepillé y entré en mi armario. Escogí un mini vestido negro con botones hasta las mangas abullonadas y un cuello blanco, unos tacones negros de satén con tirantes de perlas en los tobillos, y agarré un bolso de mano de satén negro con perlas. Después de cambiarme, me puse los pendientes de perlas en las orejas y me apliqué un tinte rosa claro en los labios. Me cepillé el cabello una vez más y rocié mi perfume Hermès 24 Faubourg. Mi teléfono sonó.
"Estoy abajo, Shuijing - Zuozuo", sonreí. Agarré mi teléfono y cerré la puerta de mi habitación. Bajé las escaleras para encontrarme con la espalda de Meizuo mirándome. Estaba mirando nuestras fotos antiguas que estaban enmarcadas en la sala de estar.
"Hola Zuo." Dije y sonreí. Se volvió hacia mí y sonrió.
"Bueno, te ves hermosa Shui ..." Dijo mientras tomaba mi mano y me hacía girar para mirarme. Me reí y solté su mano.
"¿Vamos, su alteza?" preguntó mientras se inclinaba y extendía el brazo. Hice una reverencia y enlacé mi mano en su brazo.
"Deberíamos." Respondí mientras sonreía.
Llegamos a Mingde y Meizuo aparcó el coche. Iba a salir cuando Meizuo se me adelantó. Abrió la puerta y le tendió la mano.
"¿Mi lady?" preguntó mientras sonreía burlonamente. Me reí y lo agarré.
