13. "Watch me burn it all"

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  Dios no existe.

  Al menos eso creía.
  Si alguien con tal poder existiera, estaba seguro que su vida hubiese sido diferente. Jamás lo hubiesen arrancado de los brazos de sus padres y arrebatado el amor de su hermana. No sentiría la sangre resbalar por sus garras y no vería la luz desvanecerse en los ojos de aquellos que perdieron la vida en sus manos.
 
  Dios no existe porque alguien tan misericordioso no permitiría que sus lágrimas caigan cada noche. Sabía que tal ser no existía. Theo no se libró de los Dread Doctors por obra de Dios, lo hizo porque una bestia gigante los había asesinado. No logró regresar del infierno porque había sido librado de sus pecados, lo hizo porque cierto beta tuvo la ridícula creencia de que sería útil.
  Conocía el infierno como la palma de su mano. Pero estaba seguro de que jamás pondría un pie en el paraíso, no existía tal lugar.

  O quizás sí, se atrevió a pensar por unos instantes en aquellos ojos azules aun nublados al despertar, pero ese paraíso ahora sólo pertenecía a un sueño. Y Theo sólo tenía pesadillas.

Liam:

  El beta se encontraba en una práctica de Lacrosse cuando su celular comenzó a sonar del otro lado del campo, sabía que podría ser importante pero de igual forma decidió ignorarlo. Estaba jugando terrible, y si se atrevía a dejar el entrenamiento, el coach lo dejaría en el banco el siguiente partido. Y Liam no hablaba suponiendo esto, el entrenador se había encargado de dejarlo claro antes de comenzar.

  Sabía a qué debía su distracción, por mucho que intente olvidarlo. El beta había sido sorprendido por su alfa la noche anterior, este lo había llamado y le comunicó su llegada a Beacon Hills la próxima semana, manteniendo al más joven en un estado de nervios el resto del día.
  Aún no sabía nada de Theo, la quimera parecía estar escondiendo su aroma de forma casi perfecta. Aunque a veces, Liam podía jurar que lo sentía cerca, podía escuchar los latidos de su corazón y su aroma cubrirlo por unos minutos. Pero tan pronto como el ojiazul despertaba de su sorpresa, esto se desvanecía. La primera vez que ocurrió casi desencadena otro ataque de pánico, pero en cambio, acabó con Liam golpeando los casilleros en medio del pasillo.
  Detestaba no saber como se encontraba, pero con el paso de los días su mente parecía aclararse. Pero su lobo parecía estar enloqueciendo. El animal en su pecho daba vueltas en las noches haciendo que Liam no pueda conciliar el sueño, aullando de dolor cada minuto y con constantes gruñidos involuntarios.
 
  Intentó hablar con Deaton sobre esto, pero acabó en una conversación un tanto incomoda acerca de cómo el druida extrañaba a Scott en la ciudad y aún no encontraba un ayudante como él. El beta no le habló de su condición, simplemente sonrió a las palabras del mayor y dejó la clínica veterinaria tan pronto como pudo.
  Sabía que había algo mal en él, no lograba controlar su cambio y se encontraba a sí mismo lastimado las palmas de sus manos ante cualquier situación fuera de lo común, como lo que estaba ocurriendo ahora mismo.

  Liam había recibido un empujón por parte de el equipo contrario, que de hecho eran sus propios compañeros. Esto género que el beta se levante del suelo y acabe sobre el adolescente en un parpadeo. El entrenador gritó su nombre y aún así continúo gruñiendo en la cara del otro chico, comenzando a golpear su puño contra el césped a un lado de su cabeza.

  Y entonces volvió a suceder. Sintió su cuerpo relajarse y un aroma cubrirlo. Chocolate amargo y vainilla.

  Liam se levantó tan pronto como percibió esto, dejando a su compañero aterrorizado aún en el suelo, y salió corriendo en dirección a su esencia.
  Acabo adentrándose en el bosque detrás del campo de juego, comenzando a gruñir al sentir que este comenzaba a desvanecerse rápidamente. El beta corrió tan rapido como su cuerpo lo permitía, encontrándose perdido entre los árboles, que sin el aroma de Theo, comenzaban a verse todos iguales. Cuando estaba a punto de girar y regresar a la escuela, pudo ver por el rabillo del ojo una mancha azul entre las sombras del bosque. 

I'll be good • ThiamWhere stories live. Discover now