Primera Parte

147 17 53
                                    

Era una fría y lluviosa noche en el pueblo, casi como si las nubes lloraran por lo que estaba apunto de suceder. Una sombra seguía silenciosamente a uno de los héroes, Mangel, el cuál fumaba mientras que paseaba por las calles de su hogar.

El silencio cubría el ambiente, solo pudiéndose oír a través de este los suaves pasos del de acento andaluz sobre la hierba.

La figura poco a poco se iba acercando al joven y lamentablemente este estaba demasiado distraído con su cigarrillo como para darse cuenta de lo que pasaba por sus alrededores.

En un punto dado el que lo acechaba pisó una pequeña rama, causando que el de bandana negra se girara rápidamente, con un poco de miedo en el cuerpo, o al menos antes de darse cuenta de quien se trataba.

-¡Joder! - gritó el héroe - Meh has asuta'o. Oye... ¿Y eseh cuchillo?

-No te preocupes Mangel... Te prometo que será rápido.

Silencio. Y tras unos segundos... Un grito.

-¡AAAAAH!

(...)

Todos miraban a su antiguo amigo con pena, lágrimas rodando por sus mejillas. Los más afectados eran Rubius, su mejor amigo y Lolito, su esposo, los cuales ni siquiera se podían mantener en pie del dolor que les producía su pérdida.

Auron se agachó, arrodillándose junto al muerto, cerrando los párpados de su compañero con tristeza, antes de abrazar al pelinaranja, el cuál simplemente siguió llorando y gritando desesperado que alguien le ayudara a revivirlo.

-Ya no hay nada que hacer... Lo siento Lolo - habló Alexby, antes de darle una última mirada al que había sido su amigo desde la infancia e irse de allí, camino hacia su casa, ya que prefería no llorar donde todos pudieran verlo.

Por las heridas en el cuerpo de Mangel, sabían que este había muerto acuchillado, habiendo sido atravesado por el arma blanca tres veces en el estómago y una en el hombro. Un charco de sangre ya medio seca se encontraba bajo él, sin rastro alguno del arma homicida cerca del lugar del crimen.

-No podemos dejar que el asesino se salga con la suya, tenemos que encontrarlo y meterlo en prisión para siempre - empezó a decir Fargan - Todos somos sospechosos, excepto yo claro.

-¿Y eso por qué?- preguntó desconfiado Vegetta.

-Porque yo aún no había llegado de mi misión para Los Dioses cuando se cometió el crimen; yo no pude hacerlo.

-Pues yo tengo una teoría- dijo Luzu con resentimiento - Fue Lolito, le dio uno de sus ataques y mató a Mangel.

-Mi niño, te ganó en las elecciones y te dolió, pero, déjalo ir. Tampoco es para tanto para que lo acuses de asesinato, además Lolo daría su vida por Mangel, no sería capaz de quitarle la suya - habló Auron, recibiendo un asentimiento por parte de su novio, disculpándose segundos después con el esposo de la víctima.

-Okey... Supongo que no eres sospechoso entonces David - volvió a hablar el líder de los héroes, ajenos a la conversación de la pareja Luzuplay - Te dejó a cargo de la investigación, ninguno de nosotros podrá participar en ella, a no ser que tenga pruebas concluyentes, hasta que se demuestre su inocencia. Si alguien se os acerca, sea quien sea, salid corriendo, refugiaros en grupos de 3 personas. No quiero perder a ninguno más.

Todos asintieron ante las palabras de su líder, yéndose hacia sus hogares, quedando los grupos así: Lolito, Rubius y Vegetta; Luzu, Auron y Alex y finalmente Willy y Fargan, el cuál había insistido que confiaba en el albino y que este jamás le haría daño, cediendo al final el de ojos amatistas y diciendo de que al menos si le encontraban muerto mañana sabrían quien era el asesino.

Asesino || Karmaland Three-ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora