Blue & Grey

47

La noche estaba por atraparlos.
Habían estacionado hace una hora por algo de comer. Un poco de comida chatarra.

Cuando llegaron a la entrada de un largo campo, Taehyung estacionó y miró a su costado. Jungkook dormía con su boca algo abierta, como siempre.
Pensó en despertarlo con un beso, pero sus ojos fueron hacia las papas con salsa que habían quedado. Sonrió con travesura.

Tomó una papa y untó la punta con salsa. La acercó a la boca de Jungkook, dejándola entre sus labios.
Vio cómo el menor arrugó el entrecejo y la papá cayó sobre su pecho.

Jeon abrió los ojos, confundido. Miró hacia Taehyung, quien tenía una sonrisa divertida, mientras sus labios testeaban qué era ese sabor que sentía. Iba a preguntar, hasta que vio la comida sobre él.
ㅡ Hyungie, ¿pero qué...? ㅡ sus ojos dieron con el enorme campo frente a él. ㅡ ¿Llegamos? ㅡ preguntó, tomando la papa, comiendola por completo.

ㅡ Sí ㅡ miró hacia el frente ㅡ Bueno, en realidad esta es la parte de atrás. No creo que la cerca esté abierta, así que vamos a tener que escalarlo.

Jungkook lo miró ㅡ ¿No deberían tus padres haberla abierto para nosotros?
¿Cómo haremos con las cosas que trajimos?

Taehyung no lo vio ㅡ Sí, bueno, quizás se olvidaron.
Sólo vayamos a ver y luego volvemos con la llave por nuestras cosas. ㅡ lo miró ㅡ Así vemos los animales que hay también.

El pelinegro se vio poco convencido. Es que le sonaba algo raro, más con la noche sobre ellos, ¿qué tantos animales se podrían ver con poca luz? Sin embargo, asintió.

Kim se bajó del auto y Jungkook fue atrás por su mochila, sacando la cámara fotográfica de ahí.
Caminaron hasta la cerca y el castaño fue el primero en pasar sobre ella. Jeon observó al rededor. El campo se veía bonito al anochecer, así que prendió la cámara y tomó distancia para tomar una foto.
Luego, repitió el accionar de Taehyung.

La caminata siguió por un tiempo algo largo, mientras Taehyung señalaba dónde se ubicaba tal animal.
ㅡ Allá a lo lejos, solía haber ciervos. Los criaba antes, no sé ahora si seguirá en ello. Son algo complicados.
Me llevaba mejor con los caballos.

Jungkook asentía a cada palabra, y sacaba una foto de vez en cuando, maravillado incluso con la más pequeña flor invernal en el camino. Pero poco podía ver ahora, ya que la noche los consumió.

Cuando la luz de la luna fue lo único que los guiaba, Taehyung frenó y miró contento hacia un árbol.
ㅡ ¡No puedo creer que volvieron a ponerlo!

El menor se sorprendió cuando Taehyung salió corriendo hacia el columpio colgado en aquel árbol. Lo vio subirse, y fue hacia él, trotando.
Taehyung miró las nuevas cadenas y la vieja madera, revestida un poco con unas nuevas. La veía con cariño. Vio hacia Jeon.
ㅡ Se rompió como hace diez años, y como papá siempre aplazaba su arreglo, mamá la sacó.
Pero mira, de nuevo está aquí. ㅡ dijo con una gran sonrisa.
Hacía unos cinco años que Taehyung no pisaba el lugar, era claro que las cosas no seguirían igual.
ㅡ Eh, Koo, ¿me columpias?

Jungkook alzó las cejas y sonrió ㅡ Claro. Pero dejame tomarte una foto ahí antes. No dejes de sonreír.

Taehyung accedió y Jungkook se alejó un poco para poder tomarla. El flash dio contra su cara, pero no era algo a lo que no estuviera acostumbrado.
Después de eso, Jungkook dejó la cámara colgando en su cuello y fue detrás del mayor para comenzar a impulsarlo.

De a poco, Taehyung se fue elevando. Él sólo alzaba las piernas, dejando que Jungkook hiciera todo el trabajo del balanceo.
La risa del mayor se escuchaba cada vez más fuerte, y Jungkook no podía estar más feliz por eso.