Gran Lobo Feroz

Capitulo 17

De un momento a otro termino sentada en el suelo de una de las habitaciones con Alicia y Claris, trenzando y cubriendo de flores pequeñas mi cabello.

Graciela me conto que les habían cortado el cabello de esa forma Porque hubo un tiempo en que había una plaga de pulgas y piojos. Pero ahora eran las niñas quienes preferían continuar con el cabello así.

Una de las niñas jala mi cabello tan fuerte que comienza a dolerme la cabeza. Escucho una risita proveniente de la entrada de la habitación, volteó a mirar y veo a Owen recargado en el marco de la puerta. Sus ojos azules han adaptado un color no tan habitual que me hace recordar al cielo.

--Graciela las está llamando. -Les dice a las pequeñas- a traído un par de vestidos nuevos para ustedes.

Claris se levanta y echa a correr hacia la puerta mientras que Alicia sigue acomodo un par de flores en mi cabello. Cuando termina da un paso hacia atrás y mira con recelo mi peinado con sus adornos y después imitando a Claris sale por la puerta.

Owen se acerca a mi y me tiende una mano. La tomo mientras trato de aflojar una de las trenzas que está más que apretada a un lado de mi cabeza.

--Gracias -suelto ya de pie-

--Por qué? --me pregunta con un brillo en su mirada azulada-

--Me has salvado de un dolor de cabeza horrible.- Owen suelta una carcajada que me llena el alma- Un par de estirones y jalones más y juro que mi cabeza se hubiera desprendió de mi cuerpo.

--Todo tiene un precio, Samara. -suelta mientras coloca su mano por mi cintura con sus manos y me acerca a el-

Mi nombre sale de su labios sensuales con un toque sedoso e íntimo. -¿Cuando e pensado yo que algo es sensual?- Se me escapa una risita al pensarlo.

--¿Te ríes de mi? -Me pega más a él hasta que nuestros alientos chocan-

Yo niego con la cabeza y me permito pasar mis manos detrás de su cuello y acaricio su cabello. 

--Que es lo que quieres por haber salvar mi vida? -suelto sonriendo-

--Yo de ti quiero tantas cosas... que una vida entera no me sería suficiente para todo lo que pienso hacer contigo -se acerca y besa mi cuello-

Un ligero roce de sus dientes en mi cuello me hace estremecer y soltar un jadeo. Owen sonríe con malicia.

--Pero en esta ocasión quiero un beso.

--Solo un beso? -pregunto-

El asiente y se acerca más a mi. Mate Escucho en mi interior. Los ojos de Owen se transforman en un azul más obscuro.
Me coloco de puntitas y antes de que se de cuenta le doy un casto beso en la mejilla. Su piel es suave y cálida bajo mis labios.

--Listo -sonrió divertida- eh pagado mi deuda.

Me suelto de el antes de que pueda decir algo y huyo con dirección hasta la cocina. Una de las ventanas de esta me muestra el sol ocultándose por el horizonte y unas cuantas nubes grises.

--Las pequeñas han echado de las suyas verdad? -Suelta Lucia sentada con aires tranquilos en una de las sillas-

Yo asiento y me empiezo a deshacer las pequeñas trenzas de mi cabello y a colocar en la mesa las pequeñas flores.

Lucia me cuenta sobre las madres y padres de los niños. Me cuenta desde su posición, sus parejas, su vida aquí y como desviaron lejos de la manada a los cazadores provocando sus muertes. Los niños eran aun muy pequeños y casi no los recuerdan, pero toda la manada se han echo cargo de ellos.