Una continuación ficticia a la historia tan breve de Lee Chowon y Yoo Kyungsoo, que a mis ojos tiene y tuvo demasiado potencial por explotar.
También haré mi propia versión de la historia de amor de los papás de los Park, porque si me quedé con curi...
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Después de mucho insistir, después de casi medio año de relación, Kyungsoo finalmente accedió a irse a vivir con Chowon.
La vida de pareja viviendo juntos no era tan diferente a lo que llevaban haciendo por casi medio año. Lo único que notaba de diferencia era que Chowon se veía más cómodo alrededor de él, y de igual manera había aprendido bastante sobre él:
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También vivía cosas muy tiernas a su lado. Desde hacía algunos días se venía sintiendo algo débil hasta que esa mañana, el Omega lo sintió con fiebre.Chowon llamó a su trabajo para avisar que Yoo Kyungsoo no iba a ir al trabajo, de igual manera advirtió a la universidad e incluso llamó a Hyesung:
—¡Kyungsoo!— exclamó cómo saludó el rubio.
—Ammm... no, no soy Kyungsoo, soy Chowon— el Beta lo veía desde la cama cómo jugaba con la tela holgada de su pantalón, a pesar que Hyesung era un visitante recurrente en su casa, él aún de vez en cuando se sentía avergonzado con él—, solo quería avisarte que Kyungsoo está enfermo... no es porque no te quiera aquí... es solo que podría ser contagioso para tu hijo.
—Oh... muchas gracias por avisar... ¿Kyungsoo está bien?
—Tiene mucha fiebre y tos.
—Espero que se mejore... ¡Byul, espera!—muy tarde, el bebé le había dado un manotazo al celular de su madre, luego hubo mucho ruido y unos pequeños pasos alejándose entre pequeñas risas maniacas, a lo lejos se escuchaba a Hyesung y Park Dojin reír. Una vez que las risas sonaban muy lejanas, escuchó unos balbuceos.
—Hola, Byul.
Una risita simpática le respondió.
—Owon.
—Sí, soy yo, hola.
Más risas de bebé.
—¿Robó el celular?—preguntó Kyungsoo desde la cama.
