𝑨𝒓𝒓𝒂𝒔𝒕𝒓𝒂𝒎𝒆 𝑨𝒍 𝑰𝒏𝒇𝒊𝒆𝒓𝒏𝒐 | 𝖏𝖔𝖓𝖉𝖆𝖒𝖎 [continuación]

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Luego de eso se volvieron muy unidos, incluso podía decir que se había convertido en el mejor amigo de Damian Wayne.

Cada que estaba a su lado sentía que su corazón explotaria o se quemaria, incluso podía recargarse en el hombro de Damian lo cual le hacía sentir muy especial ya que él nunca le permitía a nadie que se recargara en su hombro o su cabeza más que a su padre, Dick y a Tim. Y ahora él formaba parte de su vida por completó incluso se veían luego de las misiones.

Se sentía feliz a su lado, sentía que nada podría salir mal.

Habían pasado 3 meses después de esa pequeña reunión. Las misiones eran en equipo igual que aquella vez, cada vez aprendía más de él, sus ataques, la manera en la que buscaba los crímenes, le emocionaba tanto tenerlo a su lado, era tan inteligente.

Ya sabía incluso donde estudiaba, algunas veces lo seguía hasta ella de manera sigilosa muy detrás de él, esperando para ver con quien hablaba. Las mismas personas de siempre: dos chicos y una chica que siempre parecía acercarse bastante a él, lo cual le molestaba hasta cierto punto pero no podía hacer nada hasta ahora.

También lo miraba por la ventana de su habitación, algunas se la pasaba hasta tarde en su celular o computadora.

Jon no sabía exactamente desde cuándo empezó esa extraña obsesión de estar viendo todos los días a Damian pero era simplemente algo que debía a hacer, lo necesitaba, varias veces intentó dejar de hacerlo pero no podía dejar de pensar en él. En con quien estaría, que estaría haciendo.

Así que ahora su única meta era hacer que Damian lo amara tanto como él lo hacía.

Él de ojos azules miraba su computadora mientras apuntaba en su libreta, debía hacer la tarea para después salir con Damian a alguna misión o simplemente para reunirse con él.

—Jon —habló su padre entrando a su habitación—. ¿Cómo estás? —se sentó a los pies de la cama.

—Hola papá —hizo la computadora a un lado al igual que su libreta—. Estoy bien, estoy haciendo tarea para la preparatoria.

—Me alegra que estés haciendo las cosas bien —acarició la cabeza del menor con su mano—. ¿Vas a salir con Damian?

—Q-quizás...

—¿Él te gusta, Jon? —él menor se sorprendió bajando la mirada nervioso.

—Creo que si, papá —Clark sonrió—. Él es muy agradable conmigo, me tiene confianza.

—Estoy seguro de que a él también le gustas, Jon. Eres un chico muy amable y bueno... Damian es algo distante y arrogante pero veo que contigo es un poco diferente.

—Gracias, papá.

—Por cierto, tu madre y yo vamos a salir nuevamente por algo de su trabajo, espero que te puedas quedar solo de nuevo —Jon sonrió pensando en que podría invitar al menor a su casa a dormir.

[...]

Se encontró con Damian quien miraba su celular, se veía muy hermoso también sin su traje; traía unos jeans, una camisa negra con rayas rojas y una cadena en su cuello. Se acercó a él saludándolo con su mano. Él pelinegro sólo movió la cabeza un poco hacia arriba poniendo su celular en su bolsillo, Jon podía sentir lo sonrojado que estaba, no podía creer aún que era amigo de alguien como Damian, alguien tan perfecto.