A Hermione Granger le ocurrió algo horrible al final de la guerra contra Voldemort, y ahora está rota. ¿Ayudará su regreso a Hogwarts como aprendiz a curarla? ¿Qué se necesita para curar a Hermione, y en el proceso encontrará Severus Snape la curaci...
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El resto del día se dedicó a arreglar los asuntos de la familia. Eugene parecía casi extasiada por irse a París con Desiree, y las niñas estaban encantadas de venir a vivir a Hogwarts.
A Hermione le dolía ver que ninguna de las dos niñas parecía estar muy unida a su abuela, aunque era evidente que ambas la respetaban, pero por desgracia también era muy evidente que la anciana les daba miedo.
Hermione recordó el día en que habían dejado a Emily a final de curso, y recordó que entonces pensó que todo lo de sentarse tranquilamente a ambos lados de su abuela había parecido muy escenificado. De hecho, mientras recogían las cosas de la niña vieron que Eugene no deseaba tener nada que ver con ellas; estaba más interesada en Desiree.
Mientras empaquetaba, Hermione se dio cuenta de que aún no sabía cuál había sido el catalizador para que las chicas fueran declaradas pupilas del mundo mágico, pero Severus había estado muy tenso cuando llegó al café y era obvio que Eugene no iba a echar de menos su responsabilidad con ellas. Lo observaba, para estar segura, pero era más bien por la irritación que le producía el hecho de que tardara tanto y no de ninguna manera como Hermione recordaba que era su propia abuela.
Había tenido más o menos la edad de Emily, pero realmente había llorado su fallecimiento. Hermione había estado muy unida a Nanny Granger y se había enfrentado a su nuera cuando ésta le decía a Hermione que era rara cada vez que pasaba algo inexplicable a su alrededor.
"Es un ángel del cielo", le había dicho siempre la anciana a su nuera burlona. La bondadosa anciana había sido reivindicada cuando se descubrió que Hermione tenía magia, y había llevado a Hermione a un lado antes de que se fuera a Hogwarts y le había dicho: "Sabía que eras especial, mi niña, y que sepas que mi corazón se eleva por ti. Estaré pendiente de ti aunque no pueda estar allí". No había mencionado que sería desde el cielo, pero quizás no lo sabía, reflexionó Hermione.
Nanny Granger había muerto durante el primer año de Hermione en Hogwarts, y el padre de Hermione se había derrumbado por ello. Había sido un hombre tímido antes de la muerte de su madre, pero después había permitido que su esposa simplemente tomara el control total. Hermione deseaba que realmente dejara a su madre; tenía la creencia de que podría ser más feliz si lo hacía, pero por supuesto esa era otra historia.
Sacando su mente de ese recuerdo, Hermione consideró que hacía mucho tiempo que no pensaba en Nanny Granger, y sonrió mientras añadía un encantamiento de iluminación a una de las maletas. Pronto las pertenencias de ambas chicas estaban todas empacadas y Hermione estaba levitando todo hacia el vestíbulo principal.
Albus había vuelto a Hogwarts para "organizar el castillo", como había dicho, y había prometido que volvería a recogerlas. Al acercarse al vestíbulo delantero vio a Severus y a Draco en una profunda discusión. Ella se había preguntado dónde se había metido; había llevado un cargamento de equipaje a la puerta principal y nunca había regresado.