Capitulo 11

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¡Yo!

Ha pasado algún tiempo desde que toqué esta historia, ¡así que aquí hay una actualización para ustedes, mis queridos lectores!

¡Espero que lo disfruten!

Descargo de responsabilidad: pain17ification no posee nada

Abriendo camino

"¿Estás nervioso?" Sarutobi le preguntó a la joven sentada en su oficina.

Karin Uzumaki respiró hondo y asintió levemente. "Un poco... quiero decir, sé que lo he visto durante los exámenes de Chunin, pero esta será la primera vez que hablo con él. Si no fuera por la sensación de su chakra, y esas cadenas que usó en los preliminares, no hubiera creído que fuera un auténtico Uzumaki ".

"Bueno, solo puedo imaginar el gran alivio que fue saberlo con certeza".

"Me preocupaba no conocer a nadie más del Clan Uzumaki. Hemos estado dispersos desde la caída del Hidden Whirlpool, y mis padres escucharon rumores de que algunos de los nuestros están siendo perseguidos..."

El Hokage frunció el ceño ante esto. "Bueno, tal vez este encuentro entre tú y Naruto ayude a proporcionar un lugar para que otros Uzumaki encuentren refugio..."

"Eso espero..."

Un golpe en la puerta los interrumpió, y después de que Sarutobi le concediera la entrada, Naruto entró seguido por Grayfia y Ophis. Le dio al joven un saludo con la cabeza que fue devuelto por él y Grayfia cuando Karin se puso de pie torpemente y saludó con la mano nerviosamente.

"O-Oye", habló con ansiedad, y pudo relajarse cuando vio la brillante sonrisa que venía de su prima. "Soy Karin... Karin Uzumaki."

"Naruto," respondió, presentándose antes de acortar la distancia rápidamente y envolver a su compañero Uzumaki en un cálido abrazo. "Estoy tan contento de conocerte."

Ella se sorprendió por el abrazo, pero rápidamente se lo devolvió mientras se reía de alivio. Su risa creció con entusiasmo, y los dos Uzumaki giraron en su lugar con Karin brevemente levantada de sus pies. Grayfia sonrió suavemente al ver a su amado maestro tan feliz, y se alegró de que se las arreglara para encontrar a otro miembro de su clan disperso.

Con suerte, pronto se revelarían más miembros y el clan de su maestro podría reconstruirse como pueblo. Su Naruto-sama tendría a su familia algún día. Haría todo lo posible para que esto sucediera.

El más leve de los sonrojos se formó en sus mejillas, pero se las arregló para ocultárselo a todos los demás. Después de todo, había algunas formas de cumplir ese objetivo.

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"Entonces, espero que puedas entregar este pergamino al líder de tu aldea en mi lugar," le pidió el Hokage al Hidden Grass Jonin. "Dado que Karin ha sido recibida en el Clan Uzumaki por el único heredero de nuestra aldea, estamos dispuestos a negociar su migración a la Hoja Oculta con tu aldea".

El Jonin tomó el pergamino y suspiró con cansancio. "Entregaré el pergamino de inmediato, Lord Hokage. Solo espero que no pase nada más con respecto a mi equipo. Dos de ellos murieron por decisiones estúpidas y el último es de una nación que alguna vez se perdió. Creo que necesitaré un trago pronto..."

Sarutobi le dio a la mujer una sonrisa tranquilizadora. "Encuentro que, de los momentos más grandes de estrés, vienen momentos igualmente grandiosos de triunfo. Agradezco que aceptes esta entrega y espero poder ayudar a que tu estado de ánimo se recupere cubriendo tu cuenta esta noche por lo que puedas consumir".

La sirvienta diabólica del solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora