Lee TaeYong siempre quiso un cuento de hadas.
Tener el novio y esposo perfecto, una gran boda a la orilla del mar, y una gran casa en una urbanización hermosa.
Pero todo eso se fue al caño cuando encontró a su querido novio besandose con otro. Se se...
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Se mordió los labios, algo nervioso: si las fotos eran ciertas, iba a colgar a DoYoung.
Había confiado mucho en su novio, ¿lo peor? Ya lo había presentado a su familia el año anterior y esta navidad tenía planeado hacer lo mismo; pero con las evidencias de ahora en mano, lo dudaba mucho.
Guardó su celular en el bolsillo y salió de su departamento a toda prisa. Tomó el primer taxi que se detuvo a su encuentro y se subió, dando la dirección de su querido novio.
Había conocido a DoYoung hace dos años en un concurso de baile callejero: había sido atracción instantánea. Se observaron por un buen tiempo, hasta que este se le acercó y empezaron a charlar, cambiando de números tiempo después.
Su relación había sido muy bonita por un buen tiempo, hasta el año pasado, en donde lo llevó en navidad con su familia, para que se conocieran.
Y ahora estaba rumbo al departamento de este, con fotos en su celular comprometedoras de su novio besándose con alguien más.
Sabía que aquella maldición lo alcanzaría; que presentarlo a su familia era una mala idea.
Quiso llorar.
Se bajó del taxi tras pagar y se adentró al edificio, subiendo en el primer ascensor que se le abrió. Quería pensar que era mentira y que la maldición sobre él no lo perseguía cada vez que tenía pareja. DoYoung era un tipo diferente, lo sabía muy bien, y no se podía quejar de él como novio, ya que era excelente.
Pero desde hace unos tres meses andaba raro y eso lastimaba a nuestro querido protagonista.
Cuando las puertas se abrieron, este salió de prisa, intentando convencerse así mismo de que todo era una mentira. Avanzó algo nervioso y tocó la puerta, sin saber que esperar.
Un chico que no conocia le abrió, sorprendiendose al instante y dejándolo pasar; TaeYong se abrió paso ante una fiesta en el departamento de su novio, la cual desconocía.
¿Desde cuando DoYoung era de fiestas? Estaba confundido.
- Disculpen, con permiso -
Se abrió paso entre los presentes e intentó llegar hasta la cocina, en donde supuso que estaria su novio. Cuando llegó ahí, notó que había cupcakes de varios sabores y alcohol. Tomó uno, ya que tenia hambre y volvió a la sala, buscando a su novio.
No tuvo que avanzar mucho para verlo bailar junto a un chico, un lindo chico que estaba demasiado pegado en su pareja.
Tragó grueso, avanzando lentamente, esperando que fuera un malentendido.
Fue cuando este lo besó y TaeYong no esperó más.
- Que linda fiesta, DoYoung. Me encanta ver como invitaste a todo mundo, menos a mi, TÚ novio -
