Dangerous.[Luke Hemmings].

Capítulo 18.

-¡Qué  significa esto, Amber.-Una voz femenina me gritó.

Me separé rápidamente de Luke, miré a mi puerta.

-Mamá, no...-Me tomé mi pollera.

-¡Y tú vete de aquí!-Le gritó mi madre a Luke.

-Lo siento...-Susurró Luke, y se levantó para irse.

Mí madre espero que Luke se fuera para poder gritarme, mientras tanto yo me coloqué mi pollera, cuando se escucho la puerta cerrarse, mi madre me miró con rabia;esa no era mi madre...

-¡Qué te crees! ¡Suelta!-Me gritó.-¡No te crié para que seas una puta!

-Mamá...

-Nada ¡Esto significa qué te ibas con ese niño, que cuando llegabas tarde era por él!-Volvió a gritar;su rabia se podía notar desde un avión.

Cuando mí mamá se enoja, se enoja, todo lo señorita se le va, se convierte en otra persona.

-¡Sólo dale una oportunidad! Luke es un buen chico.-iMurmuré lo ultimo.

-¡Una oportunidad! ¡Ya qué te vi casi perdiendo la virginidad!

-La mire y me apreté los labios.-Eh...

-No eres virgen...

-Mamá...-Me mordi el labio.

-¡No quiero que vuelas a ver a ese imbecil! ¡Qué te quede claro!-Se acercó a mí.

-Dale una oportunidad, mamá.-Le supliqué.

-¡No!-Gritó.

-¿¡Porqué no!?-Le grité más fuerte.

-¡No!.-Me repitió.-Eres una puta, eso eres, yo no te crié para que te metas con cualquiera, para que te sueltes con cualquiera, estoy avergonzada de ti,  desearía no ser tú madre en estos momentos.-Dijo.

En ese momento sentí mil apuñaladas en el estómago, mis ojos se cristalizaron y las lágrimas no demoraron en caer, mis ojos parecía un río. Mi madre se dio cuenta de lo que había acabado de provocar.

-No...-Se acercó a mí.

-¡Vete!-Me alejé sin mirarla.

-Hija, lo siento.-Dijo apenada.

-¡Qué te vayas!-Le grite en su cara.

Mi mamá se alejo, al cerrar la puerta me tiré al suelo a llorar, me abracé a mí misma y así fue cómo la pase por una hora.

-Genial... Ahora soy una puta...-Susurré.

Me levanté del suelo y me senté en la cama, estuve por unos minutos sentada si hacer nada, cuando me levante agarré una mochila y guardé toda la ropa que pudiera, mientras lloraba sin parar. Al terminar me la coloque en la espalda y salí por la ventana. Comencé a caminar, me coloqué unos lentes negros para que no pudieran verme que lloraba, pero mis respiraciones de todos modos me delataban. Llegue a la casa de Luke, y toqué la puerta, cuándo lo vi salir, me saqué los lentes.

-¿Qué paso...?-Preguntó.

-Luke... Abrazame.-Dije apenas.

Luke no lo pensó y me abrazo, dejé salir toda mi rabia y pena en el pecho de él.

-Lo lamentó...-Dijo acariciando mi pelo.

-Me dijo cosas qué nunca pensé qué diría, Luke, me siento pesimo.-Dije mientras dejaba salir más lágrimas en su pollera.

-Entiendo...

-Necesitó estar contigo.-Lo miré y coloque mi frente con la suya.

-Estaré para ti cuándo lo necesites, yo te hice una promesa de qué nunca te dejaría.-Sonrió.

-Bipolar.-Saque una pequeña sonrisa.

-Llorona.-Dijo el.

-Egocéntrico, tonto y feo.-Dije rápidamente.

-No te pases.-Rió y acarició mi rostro.

-Reí.-Okay.-Lo besé delicadamente.

-Sabes... Me hace bien estar contigo, me gusta, así qué creo que no será problema que vivas conmigo, sólo que yo tengo mis reglas.-Susurró en mis labios.